
El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, continúa desafiando a las autoridades judiciales al negarse a comparecer ante la Oficina para los Casos de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO) por tercera vez.
A pesar de haber sido citado a declarar este viernes a las 10:00 hora local, sus abogados han comunicado que no se presentará.
"El presidente no comparecerá hoy ante el ministerio público porque explicó suficientemente su postura a los investigadores en el primer día de interrogatorio y no vemos motivos ni necesidad de responder a las preguntas en un interrogatorio", declaró el equipo legal de Yoon en un comunicado a la prensa.
Esta negativa se suma a la de ayer, cuando el mandatario alegó motivos de salud para no comparecer, y a su silencio durante las más de diez horas de interrogatorio del miércoles.
Yoon está siendo investigado por su breve imposición de la ley marcial en diciembre, y un tribunal recientemente rechazó impugnar su detención.
El mandatario permanece bajo custodia después de que un tribunal capitalizo rechazara el recurso presentado por sus abogados sobre la legalidad del arresto, lo que habría supuesto su liberación, y está previsto que la CIO solicite extender el período de detención antes de que venza el plazo actual de 48 horas la noche de este viernes.
El período quedó temporalmente suspendido mientras el tribunal valoraba el recurso.
La defensa de Yoon viene argumentando que la CIO carece de jurisdicción sobre la acusación de insurrección por la que está siendo investigado a raíz de su fugaz declaración de la ley marcial el pasado 3 de diciembre, una afirmación que también fue rechazada por la corte, el Tribunal de Distrito de Seúl, reconociendo así la autoridad de la oficina anticorrupción para seguir con el caso.