Las bandas criminales en Haití han convertido a los medios de comunicación en un blanco sistemático con el fin de silenciarlos, denunció este jueves un funcionario de la Unesco, quien destacó la valentía de los periodistas que ejercen su labor en condiciones extremas.
“La situación es muy alarmante, muy preocupante, porque los medios de comunicación se han convertido en un blanco”, declaró a la AFP Eric Voli Bi, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en Haití.
En diciembre, dos periodistas murieron acribillados en Puerto Príncipe mientras cubrían la reapertura de un hospital.
La semana pasada, una cadena de televisión y dos emisoras de radio fueron atacadas y saqueadas, en medio del aumento de la violencia en la capital haitiana.
“Las bandas están atacando a periodistas y redacciones, destruyéndolas e incendiándolas”, afirmó Voli Bi.
Para el representante de la Unesco, se trata de “una estrategia calculada” cuyo fin es “silenciar a los periodistas y a los medios de comunicación, e impedir que los haitianos se informen sobre la situación de forma transparente”.
Desde el año pasado, Haití ha enfrentado una nueva ola de violencia organizada, cuando las bandas lanzaron ataques coordinados en Puerto Príncipe para forzar la renuncia del entonces primer ministro Ariel Henry.
A pesar de la presencia de un gobierno interino y una fuerza de seguridad internacional liderada por Kenia, la situación sigue fuera de control. Grupos armados dominan el 85% de la capital, según datos de la ONU.
En diciembre, más de 200 personas fueron asesinadas en una persecución llevada a cabo por bandas de presuntos practicantes de vudú, entre ellos varios ancianos.
La UNESCO ha desarrollado programas de apoyo a la salud mental de periodistas y estudiantes, debido a la presión extrema bajo la que trabajan. Sin embargo, muchos reporteros carecen de equipos de protección, como chalecos antibalas.
Además de mayor seguridad, los medios de comunicación también necesitan apoyo financiero, ya que la crisis ha puesto en riesgo su viabilidad económica, explicó Voli Bi.
“También necesitan apoyo financiero, ya que las condiciones actuales han puesto en peligro la viabilidad económica de los medios de comunicación”, agregó.
Para ayudar a la prensa local a sobrevivir y fortalecerse, la Unesco planea lanzar proyectos que permitan a los medios haitianos continuar su labor en una prensa libre y sostenible.
Uno de los planes es la reestructuración de la televisión estatal, en colaboración con el gobierno interino, para que esta se convierta en un verdadero medio de servicio público, en lugar de una herramienta de propaganda estatal.
Si bien los haitianos confían en los medios privados, los estatales generan más escepticismo, afirmó Voli Bi. También señaló que la crisis haitiana ha pasado desapercibida a nivel internacional, ya que los medios extranjeros tienen poca presencia en el país.