Donald Trump volvió a insistir en que Estados Unidos recuperará el canal de Panamá durante su discurso de toma de posesión, acto que se realiza en el Capitolio, en Washington D.C., del mencionado país.
"Vamos a recuperar el canal de Panamá", insistió el magnate estadounidense, en su primer discurso como nuevo mandatario del país norteamericano.
Según Trump, durante la construcción de este paso que une al Océano Atlántico con el Pacífico, entre 1904 y 1914, EE.UU. perdió "38.000 vidas", para luego entregar su control a las autoridades panameñas, hecho que ocurrió el 31 de diciembre de 1999.
"Tontamente fue entregado a Panamá, después de que EE.UU. lo hiciera. EE.UU., quiero decir y piensen en esto, gastaron más dinero que nunca antes en un proyecto y perdieron 38.000 vidas en la construcción del canal de Panamá; y hemos sido tratados muy mal por este regalo tonto", criticó.
Reclamó que tras la entrega del control del canal a Panamá, ahora "los barcos estadounidenses están siendo severamente sobrecargados y no son tratados de manera justa en ninguna forma, y eso incluye a la Marina de los EE.UU.".
Indicó que, con ello, la promesa de Panamá hacia EE.UU. ha sido quebrantada. "Se ha roto el propósito de nuestro acuerdo y el espíritu de nuestro tratado ha sido totalmente violado", comentó.
Asimismo, mencionó que quien está "operando" el canal es China. "No se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá y lo estamos recuperando", manifestó en su discurso.
Amenaza y respuesta
En diciembre pasado, tras ganar los comicios de noviembre, Trump comenzó con las amenazas de que Washington puede exigir la recuperación del control sobre el canal si las condiciones de su transferencia al país latinoamericano siguen incumpliéndose.
De inmediato, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, respondió: "Quiero expresar de manera precisa que cada metro cuadrado del canal de Panamá y su zona adyacente es de Panamá, y lo seguirá siendo".
Posteriormente, Mulino señaló que "no hay absolutamente ninguna injerencia ni participación china en nada de lo que tiene que ver con el canal de Panamá".
"La soberanía de nuestro canal no es negociable. Es parte de nuestra historia de lucha, y una conquista irreversible. Nuestro canal tiene la misión de servir a la humanidad y a su comercio. Ese es uno de los grandes valores que los panameños le ofrecemos al mundo, dándole garantías a la comunidad internacional de no tomar parte ni ser parte activa en conflicto alguno. Las únicas manos que controlan el canal son panameñas y así seguirá siendo", expresó, más adelante, el canciller panameño, Javier Martínez-Acha.