
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reactivó este martes su ofensiva comercial al advertir que impondrá aranceles de al menos un 25% a una docena de países, aunque luego suavizó su postura al señalar que podría extender el plazo fijado para llegar a acuerdos.
Trump aseguró haber enviado cartas a 14 socios comerciales, incluidos aliados estratégicos como Japón y Corea del Sur, en las que informa que los gravámenes suspendidos en abril serán reactivados con tasas aún más altas dentro de tres semanas.
Según publicó en su red social Truth Social, Japón y Corea del Sur enfrentarán aranceles del 25 % a sus productos, mientras que países como Sudáfrica, Malasia, Birmania, Laos, Kazajistán, Tailandia y Túnez podrían enfrentar tarifas de entre 25 % y 40 %.
Sin embargo, horas más tarde, el mandatario dio señales de estar dispuesto a negociar. Consultado durante una cena en la Casa Blanca con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, sobre si el plazo del 1 de agosto era definitivo, respondió: "Diría que es firme, pero no 100% firme".
Ante la pregunta de si las cartas representan su oferta final, Trump matizó: "Diría que sí, pero si llaman con una oferta diferente y me gusta, entonces la haremos".
El pasado 2 de abril, el expresidente republicano anunció un paquete de aranceles bajo el concepto de “reciprocidad”. Sin embargo, tras la reacción negativa de los mercados, pospuso su aplicación al 9 de julio y redujo la tasa inicial a un 10%.
Aunque estaba previsto que los aranceles comenzaran a aplicarse esta semana, Trump firmó una orden para postergarlos hasta agosto y envió las cartas como advertencia previa a los países implicados. En las misivas dirigidas a Tokio y Seúl, señala que sus relaciones comerciales con Washington están “lamentablemente lejos de ser recíprocas”.