Según una investigación publicada por el diario The Washington Post, el gobierno del presidente Donald Trump busca alcanzar la cifra récord de un millón de deportaciones en 2025. Esta propuesta ha generado preocupación entre funcionarios y expertos, quienes la consideran irrealista.
La meta duplicaría con creces el récord anterior de aproximadamente 400,000 deportaciones, registrado en 2011 durante el mandato del expresidente Barack Obama.
Deportaciones a Terceros Países
Para cumplir con este objetivo, Estados Unidos estaría negociando con al menos 30 países para que acepten a miles de personas expulsadas, incluso si no son ciudadanos de esas naciones, según fuentes consultadas por el medio.
Expertos y exfuncionarios de agencias migratorias advierten que la iniciativa enfrenta grandes barreras, tales como:
A pesar de ello, el gobierno ha recurrido a una ley de 1897, conocida como la Ley de Enemigos Extranjeros, para justificar deportaciones sumarias sin audiencia judicial previa.
Caso Reciente de Expulsiones sin Juicio
El ejemplo más claro fue la deportación, el 15 de marzo, de 238 venezolanos desde EE.UU. a El Salvador, bajo la acusación de pertenecer a bandas criminales como el Tren de Aragua, aunque sin pruebas públicas. Esta acción representa el tipo de procedimiento que la administración Trump buscaría ampliar.
Desde su regreso al poder en enero, Trump ha intensificado su retórica y las medidas contra la inmigración irregular, reiterando su promesa de deportar a millones de personas, una de las principales banderas de su campaña.