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El expresidente Donald Trump, calificó el lunes que los inmigrantes en Estados Unidos posiblemente tienen malos genes criticando las políticas de la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, asegurando que permitió que mucha gente entrara por una “frontera abierta”, de los cuales “13,000 eran asesinos”.
“Muchos de ellos asesinaron a más de una persona y ahora viven felices en Estados Unidos”, continuó Trump, según recogió NBC News. “Creo que un asesino lo lleva en los genes. Y en este momento tenemos muchos genes malos en nuestro país. Se fueron, llegaron a nuestro país 425,000 personas que no deberían estar aquí, que son criminales”.
Horas después, la portavoz de la campaña de Trump, Karoline Leavitt, dijo que el expresidente “claramente estaba hablando de ASESINOS, no de inmigrantes”.
El domingo, el expresidente republicano que “gente horrible” está cruzando la frontera de Estados Unidos y calificó la situación como una “invasión de salvajes criminales”.
Los demócratas ya han criticado las declaraciones de este lunes de Trump, asegurando que se trata de un “discurso de odio”.
“Ese tipo de lenguaje es odioso, repugnante, inapropiado y no tiene cabida en nuestro país”, dijo el lunes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, KarineJean-Pierre, según NBC. “Esto surge de las mismas declaraciones viles que hemos escuchado sobre los inmigrantes que son veneno, que envenenan la sangre; eso es repugnante”.
Esta no es la primera vez que Trump aborda cuestiones raciales desde la genética.
En 2020, durante un mitin en Minnesota, elogió a una multitud blanca por tener “buenos genes ”, haciendo referencia a una creencia que los supremacistas blancos han promovido y que han llamado “teoría del caballo de carreras”.
“Tienen buenos genes. Lo saben, ¿verdad? Tienen buenos genes. Mucho de esto tiene que ver con los genes, ¿no es así? ¿No creen? La teoría del caballo de carreras. ¿Creen que somos tan diferentes? En Minnesota tienen buenos genes”, dijo en aquel momento.