
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pronunció este martes un discurso incendiario en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde lanzó duras críticas a Europa por lo que calificó como una crisis migratoria descontrolada y cuestionó el rol del organismo multilateral.
Durante su intervención en la sede de la ONU, en Nueva York, Trump acusó al propio organismo internacional de “fomentar políticas que alientan la inmigración irregular” y aseguró que “la ONU no está a la altura de los desafíos globales”.
El mandatario norteamericano también advirtió a rivales geopolíticos, entre ellos Irán, Corea del Norte y Rusia, reiterando que su gobierno “no dudará en responder con contundencia ante cualquier amenaza a la seguridad de Estados Unidos o de sus aliados estratégicos”.
En medio de las tensiones que generó su discurso, Trump anunció que la próxima semana sostendrá una reunión bilateral con el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
El encuentro se habría confirmado luego de un breve saludo entre ambos líderes en los pasillos de la sede de la ONU, minutos antes de que el estadounidense tomara la palabra en el estrado.
Las declaraciones de Trump contra la inmigración generaron un inmediato eco en varias capitales europeas. Aunque aún no se han emitido comunicados oficiales, diplomáticos presentes en la Asamblea anticiparon que los comentarios podrían tensar nuevamente las relaciones transatlánticas, ya golpeadas en los últimos años por diferencias en materia de defensa, comercio y cambio climático.