
TAIPÉI.– Taiwán se ha convertido en el mayor importador mundial de nafta rusa, un derivado del petróleo clave para la industria de semiconductores, pese a su respaldo público a Ucrania frente a la invasión rusa, según un informe publicado este miércoles por el Centre for Research on Energy and Clean Air (CREA).
El estudio revela que en el primer semestre de 2025, Taiwán compró nafta rusa por 1.300 millones de dólares, con importaciones mensuales casi seis veces superiores a las de 2022. Estos volúmenes habrían generado 1.700 millones de dólares en impuestos para el Kremlin, “suficientes para financiar 170.000 drones Gerbera”, según los investigadores.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania hasta junio de 2025, el país asiático habría importado 6,8 millones de toneladas de este derivado por 4.900 millones de dólares, equivalentes al 20 % de las exportaciones totales rusas, lo que sitúa a Taiwán como el tercer mayor comprador mundial desde el estallido del conflicto.
El informe señala que la refinería de Mailiao, propiedad de Formosa Petrochemical Corporation (FPCC), concentró el 96 % de las adquisiciones taiwanesas, aumentando su dependencia del 9 % antes de la guerra al 90 % actual.
Los expertos advierten que esta “excesiva dependencia” de la nafta rusa podría exponer a la isla a sanciones secundarias o presiones estratégicas por parte de Moscú y sus aliados, afectando la producción de gigantes como TSMC, Nvidia, AMD e Intel.
Aunque Taiwán ha adoptado sanciones internacionales contra Rusia, su economía sigue altamente dependiente de los combustibles fósiles. Según el CREA, desde febrero de 2022 ha importado energía rusa valorada en 11.200 millones de dólares.
La publicación coincide con la visita del canciller Lin Chia-lung a Polonia, donde firmó un acuerdo con Ucrania para ayudar a niños afectados por la guerra, y con otro informe británico que denuncia el apoyo de Rusia a China para una posible invasión de Taiwán.