
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se pronunció con firmeza este martes contra las propuestas impulsadas por sectores de la oposición que abogan por una intervención militar de Estados Unidos en territorio mexicano bajo el pretexto de combatir al narcotráfico.
Durante su conferencia de prensa matutina, conocida como “La Mañanera”, Sheinbaum aludió a los acontecimientos del siglo XIX, cuando México perdió más de la mitad de su territorio a causa de la guerra con Estados Unidos.

Con este recordatorio, la mandataria subrayó que las propuestas de intervención extranjera atentan contra la soberanía y la dignidad del país. “México ha demostrado que puede enfrentar sus propios retos sin depender de nadie”, agregó.
En el mismo encuentro con la prensa, Sheinbaum presentó un informe sobre seguridad pública, destacando que durante los primeros 13 meses de su Gobierno los homicidios dolosos se redujeron en un 37 %. La presidenta atribuyó este resultado a la coordinación entre fuerzas federales, estatales y municipales, así como al fortalecimiento de programas sociales.
No obstante, reconoció que aún queda mucho por hacer, especialmente frente a los crímenes que conmocionan al país, como el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, ocurrido el 1 de noviembre.

La mandataria aclaró que México está abierto a la colaboración con Estados Unidos y otros países, siempre que esta se dé en un marco de respeto mutuo y soberanía plena.

Sin embargo, advirtió que toda cooperación debe realizarse bajo los términos y decisiones del Estado mexicano, y no a través de imposiciones externas.
Las declaraciones de Sheinbaum surgen en medio de un debate interno en México, donde algunos sectores opositores sugieren una colaboración directa con el ejército estadounidense para combatir a los cárteles del narcotráfico. Estas propuestas generaron fuertes críticas desde el oficialismo, que considera que tal medida violaría la Constitución y la independencia nacional.
Analistas políticos destacan que el posicionamiento de la presidenta busca reafirmar el liderazgo de México en materia de seguridad, manteniendo la cooperación con Estados Unidos en temas de inteligencia, pero sin aceptar una intervención militar.
Con este mensaje, Sheinbaum consolida su discurso de defensa de la soberanía, apelando a la memoria histórica y a los principios de independencia nacional. Su postura busca enviar una señal clara tanto a la comunidad internacional como a los sectores internos que demandan medidas más drásticas contra el crimen organizado.
Fuente: Actualidad.