
El exadministrador del Banco Agrícola, Carlos Segura Foster, denunció que la institución perdió su rol de apoyo al sector productivo para convertirse en “una caja chica” al servicio de los intereses del actual Gobierno.
Segura Foster recordó ante las cámaras de RCC que históricamente el Banco Agrícola fue un soporte fundamental para la producción nacional, con financiamientos suficientes y en el momento adecuado. No obstante, criticó que esa función se haya desvirtuado en los últimos cuatro años.
“En este gobierno convirtieron la institución en una caja chica para favorecer las decisiones del gobierno, para comprar voluntades, para cambiar voluntades, para comprar elecciones y lograr un inmerecido triunfo”, expresó.
En ese orden, explicó que varios candidatos de la oposición durante las pasadas elecciones recibieron préstamos sin cumplir las reglas de la institución, a cambio de pasar a apoyar al partido oficialista.
"Yo tengo los nombres de al menos 10 dirigentes que fueron además candidatos por el PLD o por la Fuerza del Pueblo, que recibieron préstamos sin cumplir con la normativa de parte del Banco Agrícola", afirmó.
El miembro del Comité Central del PLD también cuestionó la forma en que el Gobierno destinó los fondos de los préstamos de tasa 0%, señalando que la mayor parte de los recursos ha favorecido a entidades estatales y a grandes empresarios, dejando de lado a los pequeños y medianos productores.
“Los primeros 5,000 millones de pesos entregados a la entidad solo sirvieron para otorgar préstamos a instituciones estatales y a grandes empresarios mientras que a los productores más vulnerables apenas les llegó entre un 10 % y un 15 % de esos recursos”, precisó Foster.

Aseveró además que en los escritorios de los gerentes quedaron más de 25 mil operaciones; solicitudes de pequeños y medianos productores que se quedaron “oliendo donde guisan”.
Segura Foster agregó que, posteriormente, el Gobierno implementó una fórmula que presentó como reconstrucción de recursos. Sin embargo, indicó que la medida consistió en convertir préstamos previamente otorgados con tasas de 8, 9 y 10%, en préstamos a tasa cero, bajo la figura de programas especiales.
Los préstamos tasa cero son facilidades financieras que el Gobierno dominicano dispuso en agosto del 2020 para financiar al sector agropecuario, con el objetivo de reactivar la producción afectada por la pandemia de COVID-19.
Los RD$5,000 millones dispuestos para la ocasión se canalizaron a través del Banco Agrícola, con el propósito de apoyar la siembra, la comercialización y la asistencia técnica en el sector agropecuario.