
Una red transnacional operada desde un call center en República Dominicana estafó a más de 400 ancianos en Estados Unidos, causando pérdidas superiores a cinco millones de dólares. La mayoría de las víctimas tenían un promedio de 84 años.
Trece personas están acusadas, cuatro de ellas en RD a la espera de extradición para enfrentar cargos en Massachusetts.
Según el Departamento de Justicia de EE.UU., los estafadores engañaban a las víctimas haciéndose pasar por familiares en problemas que necesitaban dinero. Luego, otro cómplice se presentaba como abogado para solicitar pagos por honorarios legales.
El dominicano Óscar Manuel Castaños García, de 33 años, dirigía la operación desde el call center, supervisando y pagando a los empleados que realizaban estas llamadas.
El Ministerio Público dominicano realizó 34 allanamientos y detuvo a nueve personas en Santiago, Puerto Plata y Santo Domingo, en coordinación con el FBI.
Los acusados enfrentan cargos de conspiración para cometer fraude postal y electrónico, así como lavado de dinero, con penas que pueden alcanzar hasta 20 años de prisión y multas millonarias.
