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Decenas de mujeres vestidas de novia recorrieron este martes el campus de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) en la tradicional Marcha de las Novias, un acto simbólico que busca visibilizar los feminicidios y exigir justicia para las víctimas de violencia de género.
A las 9:00 de la mañana de este martes 25 de noviembre, las participantes iniciaron el recorrido de unos 500 metros, portando vestidos blancos y velos negros en señal de luto. Durante la caminata, corearon consignas como “negar derechos es feminicidio”, “queremos derechos, no flores” y “basta de golpes y control”, expresiones que resumen el reclamo central de la jornada.
La actividad honra la memoria de Gladys Ricart, una dominicana-estadounidense asesinada el día de su boda en 1999, y se realiza cada 25 de noviembre en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La vicerrectora de Extensión de la UASD, Rosalía Sosa Pérez, informó que en lo que va de 2025 se han registrado 49 feminicidios en el país, una cifra que calificó como “dolorosa e inaceptable”. Indicó que provincias como San Cristóbal, La Altagracia, Santiago y el Gran Santo Domingo concentran gran parte de los casos.
“Este no es un día para celebrar, sino para conmemorar. Marchamos por las que no tienen voz, por las que se nos fueron y por las que siguen atrapadas en la violencia”, expresó.
La directora del Instituto de Género y Familia, Virtudes de la Rosa, señaló que República Dominicana mantiene un promedio anual de 70 a 90 feminicidios, lo que evidencia la falta de impacto de los mecanismos de prevención. De acuerdo con sus datos, solo en 2025 se han registrado entre 50 y 63 asesinatos de mujeres por razones de género.
De la Rosa también advirtió que la violencia contra la mujer es el delito más denunciado, según la Procuraduría General, pero solo el 4 % de las víctimas llega a presentar una denuncia formal. Además, resaltó que más del 75 % de los feminicidios son cometidos por parejas o exparejas, un reflejo de desigualdad de poder, dependencia y control emocional.
El director de Relaciones Nacionales e Internacionales de la UASD, Antonio Medina, afirmó que la violencia contra la mujer es un fenómeno estructural y arraigado en la cultura machista. Señaló que no basta con endurecer penas, sino que se necesitan políticas públicas efectivas, un sistema judicial sensible y una educación sostenida que transforme los patrones socioculturales.