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A pesar del brote de fiebre amarilla en Colombia, que ha causado la muerte de al menos 23 personas, las autoridades sanitarias de la República Dominicana aseguran que no hay una alerta epidemiológica para el país.
Gracias a un programa de vacunación que ha estado en funcionamiento durante décadas, el riesgo de contagio se mantiene controlado. El viceministro de Salud Colectiva enfatizó que “la República Dominicana no está en riesgo”, descartando que el brote colombiano represente una amenaza inmediata.
“Sin embargo, mantenemos una vigilancia activa sobre arbovirosis, como el dengue y la fiebre amarilla, enfermedades con las que hemos trabajado durante muchos años”, añadió.
Pérez aclaró que la vacunación contra la fiebre amarilla es obligatoria para quienes viajan a países donde esta enfermedad es endémica, como parte de los controles sanitarios internacionales. “En el país, tenemos las dosis disponibles, y el protocolo está activo desde hace años”.
Las autoridades recordaron que la fiebre amarilla es una enfermedad viral transmitida por mosquitos. Aunque no circula en la República Dominicana, se aplican medidas de prevención similares a las del dengue. “La mayoría de las personas en países endémicos ya han padecido la enfermedad o están vacunadas, y solo se contrae una vez”.
Salud Pública continúa realizando operativos de prevención contra arbovirosis en diferentes sectores del Gran Santo Domingo, que incluyen fumigación y la distribución de material educativo.
Para prevenir estas enfermedades, las autoridades recomiendan eliminar criaderos de mosquitos, mantener los tanques tapados y acudir al médico ante fiebre persistente o dolores musculares intensos.
Aunque no hay motivo de alarma, las autoridades subrayan la importancia de mantener la vigilancia.
