x
Ricardo Ravelo, presidente de los Tigres del Licey criticó a David Ortiz, a raíz de las declaraciones que el exjugador de grandes ligas hizo contra el capitán del equipo, Emilio Bonifacio, y la propia organización deportiva, durante la celebración de "Serie de Titanes".
En una entrevista con el cronista deportivo Héctor J. Cruz, el presidente de los azules trajo otra vez a la mesa el tema que fue debatido y objeto de muchos rumores y especulaciones durante los meses de enero y febrero, debido a que Ortiz, que es socio de Félix Cabrera en la organización del evento, hizo acusaciones de mal manejo de fondos a Emilio Bonifacio.
“David lo que es un sinvergüenza, eso no se hace, no puede acusar al Capitán Azul de mal manejo de ese dinero, ni mucho menos al presidente del Licey. Eso fue una ‘patanería’ del Big Papi”, dijo Ravelo.
El dinero era por concepto de compensación a los jugadores, por haber tenido que viajar en vuelo comercial. Ravelo relató que se había decidido entre las partes que el dinero sería entregado a Bonifacio para ser repartido entre todos, porque los jugadores aceptaron la compensación ofrecida por Latin Events.
“Fue Félix Cabrera quien ofreció la compensación y los jugadores la aceptaron. Pero ese dinero nunca debió entrar a la cuenta del Licey porque no era para para nuestro club”, dijo Ravelo.
El ejecutivo azul resaltó, además, que la relación de dos años con Cabrera fue un desastre. “Todo se reduce a que Félix no asume su responsabilidad, cuando firma un contrato, por ejemplo de 20 puntos, una vez firmado luego empieza a querer anular o cambiar cada uno de ellos, y eso no es posible”, puntualizó.
El pasado mes de diciembre los Tigres Licey y las Águilas Cibaeñas se enfrentaron en dos partidos en el estadio Hiram Bithorn de Puerto Rico, poniendo punto final a la segunda versión de la llamada Serie de Titanes entre los grandes rivales del béisbol dominicano.
Antes de eso, se había efectuado un partido único entre los dos equipos en el Citi Field, de Nueva York, hogar de los Mets, el 10 de noviembre.
Hubo una suspensión de dos juegos, fijados originalmente en el Yankee Stadium, pero no pudieron celebrarse por desacuerdo entre la empresa de Félix Cabrera, Latin Events, y la administración de los Yanquis, que cobraban 2 millones de dólares por cada partido.
Pero en medio de la cancelación y mudanza a Puerto Rico, para el juego en Citi Field se produjo un encontronazo entre Licey y Cabrera.
Se había acordado que los equipos viajarían en vuelo chárter, pero no sucedió así y Licey tuvo que hacerlo en vuelo comercial.
Fruto de eso, los organizadores de Latin Events ofrecieron una especie de compensación, pagando 40 mil dólares a los jugadores del Licey, dinero que fue depositado en una cuenta personal del capitán azul, Emilio Bonifacio, para repartir a sus compañeros.
Ese hecho desató una polémica entrando a la discusión David Ortiz, socio de Cabrera, quien dijo que el Capitán tendría que explicar o devolver ese dinero. Inclusive, Ortiz habría dicho que Licey y Bonifacio serían demandados por su empresa.
