
El presidente de Kenia, William Ruto, advirtió este lunes que los avances obtenidos en Haití por la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), encabezada por su país, podrían perderse si la comunidad internacional no garantiza los recursos necesarios para una transición ordenada cuando el mandato concluya el próximo 2 de octubre.
Durante un encuentro paralelo a la Asamblea General de la ONU, Ruto resaltó que la misión —integrada por 989 policías, de los cuales 735 son kenianos— logró restablecer operaciones en puntos estratégicos como el aeropuerto, el Palacio Presidencial, la academia de policía, varias rutas de acceso y el puerto. También destacó la reapertura de escuelas y hospitales.
Sin embargo, el mandatario calificó como “inaceptable” la falta de respaldo financiero y logístico. Recordó que la misión debía desplegar 2,500 efectivos con equipos y vehículos blindados, pero hasta ahora ha operado apenas al 40 % de su capacidad. Incluso, criticó que gran parte de los vehículos recibidos fueran de segunda mano y presentaran fallas en zonas de alto riesgo.
“Kenia no contó con un mandato claro ni con un paquete de recursos predecibles”, afirmó, señalando que esas limitaciones impidieron instalar bases en territorios dominados por las bandas. “Las mujeres y los niños haitianos merecen algo mejor. La indiferencia internacional frente a las pandillas es insostenible”, agregó.
En el mismo evento, el subsecretario de Estado de EE. UU., Christopher Landau, respaldó la labor keniana y llamó al Consejo de Seguridad a aprobar una nueva misión con 5,500 efectivos antes de que expire el mandato actual.
La MSS, aprobada en 2023 y activada en 2024, fue solicitada por el gobierno haitiano para apoyar a sus fuerzas de seguridad frente a las pandillas, que todavía mantienen control sobre gran parte de la capital y otras regiones del país.