Abrir los ojos por la mañana, levantarse de la cama y notar que el rostro se ve hinchado es una situación común para muchas personas. A veces, la inflamación desaparece al cabo de unos minutos, pero en otras ocasiones puede persistir durante horas, afectando la apariencia y generando molestias. Este fenómeno tiene múltiples causas, desde hábitos de sueño y alimentación hasta condiciones médicas que afectan la retención de líquidos y la circulación sanguínea.
En la mayoría de los casos, la hinchazón facial matutina se debe a una acumulación de líquidos en los tejidos del rostro, algo que ocurre de manera natural mientras dormimos. Sin embargo, ciertos factores pueden agravarla.
Según Medical News Today, la hinchazón facial puede ser ocasionada por múltiples factores, desde la retención de líquidos hasta condiciones médicas más serias como el síndrome de Cushing, la preeclampsia o la anafilaxia, que requieren atención médica inmediata.
Adoptar hábitos saludables, cuidar la postura al dormir y aplicar remedios caseros puede ayudar a mantener un rostro más descansado y desinflamado cada mañana.
Durante el sueño, el cuerpo tiende a retener líquidos, especialmente si la personaconusmió alimentos con alto contenido de sodio, alcohol o poca agua durante el día. Además, factores como la postura al dormir, cambios hormonales y problemas circulatorios pueden favorecer la acumulación de líquidos en el rostro. Entre las razones más frecuentes se encuentran:
Retención de líquidos: el descanso prolongado en una misma posición puede dificultar el drenaje linfático y la circulación, lo que provoca hinchazón.
Exceso de sal en la dieta: el sodio favorece la retención de líquidos y puede hacer que el rostro luzca inflamado por la mañana.
Deshidratación: si el cuerpo no recibe suficiente agua, puede compensarlo reteniendo líquidos, lo que se refleja en el rostro.
Falta de sueño o mala calidad del mismo: no descansar lo suficiente puede afectar la circulación y promover la inflamación facial.
Consumo de alcohol: el alcohol deshidrata y altera el equilibrio de líquidos en el cuerpo, provocando hinchazón matutina.
Cambios hormonales: durante el embarazo, la menstruación o la menopausia, es común que el cuerpo retenga más líquidos, lo que puede reflejarse en el rostro.
Problemas circulatorios o linfáticos: si el sistema linfático no drena correctamente los líquidos, puede provocar acumulación en ciertas zonas del cuerpo, incluida la cara.
La postura al dormir juega un papel clave en la acumulación de líquidos en el rostro. Algunas posiciones favorecen el drenaje natural del cuerpo, mientras que otras pueden empeorar la hinchazón.
Utilizar una almohada adecuada que proporcione soporte y eleve la cabeza ligeramente, pero sin generar tensión en el cuello.
Dormir boca arriba con la cabeza elevada es la mejor opción para evitar la retención de líquidos en la cara. Al mantener la cabeza más alta que el resto del cuerpo, la gravedad facilita el drenaje linfático y evita la acumulación de fluidos en el rostro.
Evitar dormir boca abajo o de lado, ya que estas posiciones pueden favorecer la acumulación de líquidos en una parte del rostro, haciendo que la hinchazón sea más evidente en un solo lado.
La retención de líquidos en el rostro puede manifestarse con síntomas visibles y palpables. Algunas señales incluyen:
Si la hinchazón facial es frecuente y se acompaña de otros síntomas como dificultad para respirar, fatiga extrema o inflamación en otras partes del cuerpo, es recomendable consultar a un médico para descartar afecciones subyacentes.
Fuente: Infobae