Pentágono permite acceso solo a periodistas de medios conservadores tras nuevas restricciones

30 grandes medios internacionales renuncian a su acreditación en el Pentágono en protesta por las nuevas restricciones, consideradas una amenaza a la transparencia y libertad de prensa.

El Departamento de Guerra de Estados Unidos anunció este miércoles que unos 60 periodistas, en su mayoría pertenecientes a medios de comunicación de tendencia conservadora, recibirán acceso autorizado al Pentágono luego de firmar un acuerdo que limita la capacidad de realizar investigaciones independientes.


Medios afines a Trump entre los acreditados

Entre los medios aceptados se encuentran Frontlines, filial de Turning Point USA, organización fundada por el fallecido activista Charlie Kirk; además de portales como The Gateway Pundit y The National Pulse, conocidos por su apoyo abierto a la Administración del presidente Donald Trump, según confirmó el portavoz del Departamento, Sean Parnell.

Parnell aseguró que los comunicadores que firmaron el documento —más de 60 en total— fueron catalogados como “periodistas independientes de un espectro amplio”, aunque varios analistas y asociaciones de prensa han denunciado un intento de control informativo dentro de la institución militar más poderosa del mundo.


Protestas de medios internacionales por las nuevas normas

La medida llega una semana después de que 30 de los periódicos más importantes del mundo, entre ellos EFE, Reuters, The New York Times y BBC, renunciaran a su acreditación en protesta por las restricciones impuestas por el Pentágono, que exigen firmar un documento de 21 páginas.

Este texto regula desde las solicitudes de información y el uso de fotografías, hasta la movilidad y estacionamiento dentro del edificio.

Durante más de cinco décadas, los periodistas con acceso al Pentágono gozaban de amplia libertad para entrevistar a funcionarios, obtener datos sobre operaciones militares y consultar documentos presupuestarios.

Sin embargo, desde la llegada del secretario de Guerra Pete Hegseth —excomentarista de Fox News— en enero pasado, las ruedas de prensa regulares fueron suspendidas y se implementaron controles más estrictos sobre la información.

En mayo, Hegseth restringió además las zonas desclasificadas que solían recorrer los reporteros y ordenó pruebas de polígrafo a empleados del Departamento para identificar posibles filtraciones.

Las nuevas reglas, en vigor desde hace una semana, marcan un giro histórico en la relación del Pentágono con la prensa, que organizaciones internacionales califican como una amenaza a la transparencia y a la libertad de expresión amparada en la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense.