El papa Francisco continúa su recuperación por problemas respiratorios, pero este miércoles dio una señal clara de mejoría cuando recibió en el Vaticano a 70 médicos, enfermeros y directivos del hospital Gemelli de Roma, donde estuvo internado por 38 días.
Fue su primera audiencia pública desde que salió del hospital, el pasado 23 de marzo, lo que confirma avances en su estado de salud. Aún así, sigue siendo incierta su participación en los ritos de Semana Santa, para los que ha delegado en varios cardenales.
“Gracias por vuestro servicio en el hospital, muy bueno, seguid así”, dijo Francisco, durante un encuentro que duró unos 20 minutos, según informó la Santa Sede.
El pontífice recibió al equipo del Policlínico Gemelli, a miembros de la Universidad Católica y a personal de la Dirección de Salud e Higiene del Vaticano. También se dirigió con humor a la rectora Elena Beccalli:
“¡Cuando mandan las mujeres, las cosas van bien!”
Francisco les agradeció por su atención médica y espiritual durante su hospitalización y les pidió:
“Rezo por ustedes. Por favor, háganlo por mí”.
Desde su alta médica, el Santo Padre ha hecho apariciones sorpresa, como el Domingo de Ramos, cuando se presentó en la Plaza de San Pedro en silla de ruedas, sin necesidad de oxígeno, para saludar a los fieles.
Sin embargo, su presencia en las misas y celebraciones más importantes de la Semana Santa sigue sin confirmarse. Por ahora, ha delegado en otros miembros del clero las ceremonias del Jueves y Viernes Santo, el Vía Crucis en el Coliseo, la Vigilia del Sábado Santo y la misa de Pascua.
Según fuentes del Vaticano, el Papa presenta avances en su movilidad, respiración y voz, aunque continuará con la convalecencia recomendada por sus médicos.