El Papa Francisco, de 88 años, que continúa su convalecencia en Santa Marta tras pasar cinco semanas hospitalizado con una neumonía bilateral, dirigió un mensaje a los fieles de las diócesis italiana de Grosseto y Pitigliano-Sovana-Orbetello, quienes se encuentran en Roma con motivo del Jubileo de la Esperanza 2025.
Dirigiéndose especialmente a los enfermos les pidió que, cómo hace él, vivan “este periodo de prueba contemplando al Señor Jesús en la Cruz”.
“Dirijo en particular mi pensamiento a aquellos de entre vosotros que están enfermos y son ancianos: vivamos este tiempo de prueba contemplando al Señor Jesús en la cruz, fuente de consuelo y de salvación”, señaló en el mensaje el Papa Francisco, que este domingo se presentó por sorpresa en público y se le vio mucho mejor que hace dos semanas, cuando recibió el alta del Gemelli.
De hecho, el Pontífice incluso se dedicó a saludar a todos los que se cruzaban por su camino y estrechó con efusión las manos de algunos peregrinos con los que también intercambió algunas palabras.
En el mensaje a los peregrinos italianos, que han viajado a la capital italiana acompañados por su nuevo Obispo, Mons. Bernardino Giordano, el Papa Francisco les invitó a vivir intensamente esta experiencia jubilar. “Que el paso por la Puerta Santa renueve a todos en la fe, para que caminemos juntos, pastor y rebaño”, escribió el Pontífice.
Ante los desafíos del mundo actual, el Papa Francisco exhortó a los fieles a “perseverar en la oración, dando testimonio diario de esa esperanza que nos convierte en sal de la tierra”.
El Papa Francisco concluyó su mensaje encomendando a los peregrinos a la intercesión de la Virgen María, impartiendo su bendición con todo el corazón. “Por favor, no olvidéis rezar por mí”, pidió finalmente.
La prescripción de los médicos es que el Pontífice no retome hasta dentro de al menos otras seis semanas las audiencias con grandes grupos de fieles. De momento, el Vaticano no ha aclarado cómo será su participación en las ceremonias litúrgicas de Semana Santa.