
La exvicepresidenta de la República y directora general de Ética e Integridad Gubernamental, Milagros Ortiz Bosch, afirmó que el caso SeNaSa venía siendo detectado desde hace un tiempo, aunque reconoció que existieron fallas estructurales en los mecanismos de control y prevención dentro del Estado.
Durante su participación en el programa El Sol de la Mañana, Ortiz Bosch explicó que antes de que el caso saliera a la luz pública ya circulaban rumores y señales de alerta desde los años 2024 y 2025. Señaló que, aunque el país firmó convenciones internacionales contra la corrupción, estas no se implementaron de manera articulada, lo que debilitó el sistema de prevención.
"Se venía detectando porque había muchos rumores", afirmó la funcionaria al responder los cuestionamientos de la panelista María Elena Núñez en torno a si no hubo fallas a nivel de control preventivo y financiero de parte de las instituciones encargadas de vigilar estas acciones.
La funcionaria sostuvo que el principal reto ha sido la descoordinación institucional, ya que muchas herramientas legales existen, pero no se utilizaron de forma integrada. “Se hicieron las cosas una por una, dispersas, pero no como una coalición”, manifestó, al tiempo que aseguró que actualmente se trabaja para corregir esas fallas.
Ortiz Bosch admitió que hubo deficiencias desde el inicio en los controles internos, pero subrayó que el enfoque actual debe estar en corregir y fortalecer el sistema, no solo en revisar el pasado. Indicó que la prioridad es prevenir, no reaccionar tarde.

La directora de Ética informó que el Gobierno avanza en una estrategia nacional de prevención y lucha contra la corrupción, diseñada para conectar todas las instituciones del Estado bajo un mismo sistema de integridad. Aseguró que el trabajo ya tiene más de un año y medio de desarrollo y se encuentra en una fase avanzada.
Ortiz Bosch destacó que la República Dominicana fue declarada país piloto por las Naciones Unidas para un programa de uso articulado de datos en la lucha contra la corrupción. Explicó que hoy el Estado dispone de información clave sobre compras públicas, presupuesto y nóminas, pero que el desafío es usarla de manera efectiva.
Aclaró que la Dirección de Ética e Integridad Gubernamental no investiga ni audita, sino que verifica y publica el cumplimiento de la Ley de Acceso a la Información. Señaló que cuando asumió el cargo solo el 40 % de las instituciones cumplía con transparencia, cifra que hoy supera el 93 %.
La exvicepresidenta aseguró que los avances en transparencia han contribuido al aumento de la confianza internacional y la inversión extranjera, al considerar que los indicadores actuales responden a datos verificables y no a discursos.
Ortiz Bosch afirmó que trabaja de cerca con el presidente Luis Abinader, a quien definió como un mandatario “alerta y confiable” en la lucha contra la corrupción. Indicó que, aunque no se puede erradicar totalmente este mal, sí se pueden generar consecuencias reales.
Al referirse a la ausencia histórica de mujeres en la Presidencia, atribuyó el fenómeno a una cultura machista aún arraigada, aunque aseguró que ese escenario cambiará con el tiempo. “La mujer va a tener su papel, tarde o temprano”, afirmó.
Sobre el legado del expresidente Juan Bosch, Ortiz Bosch consideró que hoy estaría inconforme con todos los niveles de corrupción. Recordó su firmeza ética y sostuvo que el desarrollo económico y social es clave para transformar la cultura política.