
Diversas organizaciones sociales y ambientales acudieron este martes al Tribunal Superior Administrativo (TSA) para solicitar la suspensión inmediata de los trabajos de desmonte que realiza la minera Barrick Gold en la comunidad de El Naranjo, ubicada en Zambrana, Cotuí, provincia Sánchez Ramírez. En esa zona nace el río Naranjo, considerado una fuente crucial de agua para al menos seis comunidades aledañas.
Además del recurso de urgencia, los colectivos interpusieron una acción de amparo preventivo ante los posibles daños derivados de la instalación de una nueva presa de colas que la empresa tiene proyectada en el área.
Entre las entidades firmantes figuran el Instituto de Abogados para la Protección del Medio Ambiente (INSAPROMA), el Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), el Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático (CNLCC) y el Espacio Nacional por la Transparencia de la Industria Extractiva (ENTRE), junto con otras agrupaciones como la Red Socioambiental, la Articulación Nacional Campesina y la Fundación GEMA.
Alertan sobre deforestación y amenaza a fuentes hídricas
De acuerdo con las organizaciones, la minera ha iniciado una tala intensiva de árboles y la construcción de una vía de acceso que estaría afectando no solo el río Naranjo, sino también otras 26 fuentes de agua que abastecen a más de mil habitantes de la zona. Acusan al Ministerio de Medio Ambiente y a las Fuerzas Armadas de permitir y facilitar estas acciones, lo que consideran una grave omisión de sus deberes.
Asimismo, denuncian que las labores de Barrick Gold se están desarrollando sobre terrenos privados, cuyos dueños —los moderadores de El Naranjo— habrían sido reprimidos por efectivos militares y policiales. Las organizaciones sostienen que estas acciones vulneran derechos fundamentales como el acceso al agua, el respeto al medio ambiente y la propiedad privada.