La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este jueves que el nivel de hambruna y malnutrición en Gaza sigue siendo crítico, incluso tras el alto el fuego en vigor desde el 10 de octubre, debido a que la ayuda alimentaria que llega a la Franja no es suficiente para cubrir las necesidades de la población.
«La ayuda es significativamente baja, no puede reducir el nivel de hambre y la situación sigue siendo catastrófica porque no llega lo suficiente», aseguró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Actualmente entran entre 200 y 300 camiones de ayuda al día, muy por debajo de los 600 requeridos y acordados, y muchos de esos envíos son comerciales, lo que deja a la población más vulnerable sin acceso a alimentos básicos.
El representante de la OMS en Cisjordania y Gaza, Rik Peeperkorn, indicó que aunque la llegada de ayuda humanitaria ha mejorado desde el alto el fuego, el paso de Rafah permanece cerrado, así como otros puntos internos, dificultando la asistencia al norte de la Franja.

Según la OMS, al menos 411 gazatíes murieron por malnutrición este año, incluyendo 109 niños, 89 de ellos menores de cinco años, mientras que cerca de 600.000 personas siguen sufriendo niveles de seguridad alimentaria catastróficos.
La crisis sanitaria también es alarmante: el conflicto dejó 170.000 heridos, incluidos más de 5.000 amputados y 3.600 con graves quemaduras, mientras 42.000 personas requieren rehabilitación prolongada, 4.000 mujeres dan a luz cada mes en condiciones de riesgo, y un millón de personas necesitan asistencia en salud mental. Además, 14 de los 36 hospitales de Gaza han detenido operaciones, según Tedros.
La OMS inició esta semana las primeras evacuaciones médicas desde el alto el fuego, con 41 pacientes trasladados, principalmente niños, pero otros 15.000 aún necesitan salir de Gaza para recibir tratamiento especializado. El director general enfatizó la urgencia de reanudar los envíos de pacientes a Cisjordania y Jerusalén Este.
La OMS ha elaborado un plan de 60 días para recuperar parcialmente los servicios sanitarios en Gaza, con un costo estimado de 45 millones de dólares, aunque la reconstrucción completa del sistema de salud requerirá al menos 7.000 millones de dólares.
La organización instó a la comunidad internacional a incrementar la ayuda humanitaria y abrir todas las rutas posibles para atender la emergencia alimentaria y sanitaria en la Franja de Gaza.