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La Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) mostró este miércoles preocupación por la inseguridad, el desempleo, especialmente en los jóvenes y el alto costo de la vida, calificándolos como males sociales que afectan fuertemente al país.
A través de su carta pastoral, titulada “Caminemos juntos: la esperanza no defrauda”, los católicos manifestaron que mantienen su firme compromiso y misión de estar al lado de los más necesitados, de los marginados y de los que sufren.
“A raíz de la inseguridad en la que viven numerosas familias, el desempleo que golpea especialmente a los jóvenes, y el impacto del alto costo de la vida, la Iglesia reafirma su misión de estar al lado de los más necesitados, de los marginados y de aquellos que sufren en su lucha por un futuro más digno y esperanzador”, detalla un documento enviado a la prensa.
En el documento, cuyo tema surge a propósito del “Sínodo de la Sinodalidad y el Jubileo 2025, los religiosos agregan que les duele ver cómo estas realidades laceran la dignidad humana y limitan el acceso a los derechos fundamentales que todo ser humano posee.
Renovar la esperanza
Los obispos exhortan a renovar el compromiso con la justicia social, el desarrollo integral y la protección de los más vulnerables en la República Dominicana.
La queja reseñada en la Carta Pastoral surge a pocos días de que el Gobierno dominicano haya informado sobre una reducción de la pobreza monetaria en el país, situándose en el 20.8 % de la población.
Además, el Gobierno también reveló que la criminalidad en el país ha descendido en el último año, colocándose en 9.6 por cada 100,000 habitantes.