
Una mujer embarazada denunció haber sido víctima de abuso de poder por parte de una agente de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesset), identificada como Patricia Pérez, durante un operativo realizado en Boca Chica.
La denunciante, Camila Zapata, relató que se desplazaba en una motocicleta junto a su esposo cuando ambos fueron detenidos por la agente.
Indicó que, tras comprobar que los documentos estaban al día, la agente cuestionó el uso del casco y procedió a retener la motocicleta. Según su testimonio, pese a que no mostró conducta agresiva ni irrespetuosa, la agente le roció gas pimienta en el rostro, lo que —afirma— le provocó daño físico y una humillación innecesaria.