El Consejo Nacional de Educación aprobó este jueves el Plan Decenal de Educación Horizonte 2034, una iniciativa que busca fortalecer el sistema educativo preuniversitario en República Dominicana durante la próxima década.
La estrategia incluye la expansión y modernización de la oferta educativa, la capacitación y supervisión docente, la actualización del currículo escolar y una gestión institucional eficiente y transparente enfocada en resultados.
El Ministerio de Educación (Minerd) informó que el plan fue elaborado tras un proceso de consulta liderado por el ministro Ángel Hernández, en el que participaron estudiantes, docentes, directores de centros educativos, representantes de la sociedad civil y otros actores clave del sector.
Informó que el plan identifica los problemas que limitan el cumplimiento del derecho a la educación de forma efectiva; establece las transformaciones necesarias para lograr los cambios y señala las responsabilidades que deben asumir los diferentes actores clave vinculados a la educación dominicana.
"El problema central de la educación preuniversitaria en la República Dominicana radica en su baja calidad y pertinencia, lo que se traduce en reducidos logros de aprendizaje y en un desarrollo limitado de las competencias necesarias para llevar una vida plena, tanto en el plano personal como social", enfatiza el texto.
El documento fue presentado por la consultora Magdalena Lizardo en la reunión del Consejo Nacional de Educación como un consenso nacional sobre el futuro de la educación dominicana. El último plan decenal que se hizo en el país culminó en el año 2018.
El nuevo plan decenal plantea proveer una educación inclusiva, equitativa y de calidad que asegure el acceso, la progresión y la culminación oportuna de la educación preuniversitaria y el logro de aprendizajes pertinentes y significativos.
Sostiene que para la planificación de los servicios educativos y, en particular, de la infraestructura escolar, es fundamental contar con nuevas proyecciones de población por edad y municipios que incorporen los resultados de la dinámica poblacional arrojada por el Censo de Población de 2022, ya que las proyecciones disponibles datan de 2014.
Asimismo, señala la necesidad de que el sistema educativo propicie que los estudiantes dominen competencias para hacer frente a las transformaciones vertiginosos en el ámbito tecnológico y puedan adaptarse al cambiante mundo del trabajo en las próximas décadas.