El Gran Santo Domingo inició ayer su tradicional proceso de descongestión, tras registrarse un notable incremento en el desplazamiento de ciudadanos hacia distintas provincias del país con motivo de las celebraciones de Nochebuena y Navidad.
El flujo de viajeros dinamizó las principales terminales de transporte interurbano, donde se observó una movilización constante de pasajeros bajo la supervisión de los organismos de seguridad del Estado.
En puntos neurálgicos como la terminal del kilómetro 9 de la Autopista Duarte, que conecta con la región Norte, así como en las paradas con destino al Sur y al Este, la afluencia de pasajeros mantuvo un ritmo ascendente desde las primeras horas de la mañana.
Representantes del sector transporte informaron que, pese al alto volumen de usuarios, el despacho de unidades se realiza con fluidez y sin variaciones en las tarifas oficiales. William Pérez Figuereo, presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones del Transporte (CNTU), aseguró que las unidades están en óptimas condiciones y que los choferes han sido instruidos para conducir con prudencia, priorizando la seguridad de los pasajeros.
Mientras tanto, el panorama en la capital reflejaba una transición hacia la calma en sus principales avenidas, contrastando con la intensa actividad registrada en las salidas de la ciudad. No obstante, en horas de la tarde de ayer se produjo una fuerte congestión vehicular producto de los preparativos finales para la Nochebuena.
El desplazamiento masivo ocurre bajo el operativo preventivo “Conciencia por la Vida”, mediante el cual el Gobierno dominicano ha desplegado a más de 48,000 colaboradores de diversas instituciones de socorro para brindar asistencia en las principales vías del país.