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Desde el pasado 2 de junio, la Dirección General de Migración (DGM) de la República Dominicana dejó de aceptar pagos en efectivo para todos sus servicios, implementando un sistema de cobro completamente electrónico que, hasta ahora, funciona con normalidad.
El director general de la institución, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, explicó que la medida responde a la necesidad de fortalecer la transparencia y adaptarse a las nuevas dinámicas tecnológicas. “Había muchas transacciones en efectivo, y el manejo de efectivo siempre genera críticas, porque puede haber un manejo discrecional y mayor dificultad de fiscalización”, indicó.
La DGM ha instalado cajeros automáticos en sus oficinas para facilitar el acceso a los pagos electrónicos, especialmente a quienes no poseen tarjetas de crédito. Esto permite que cualquier usuario pueda realizar sus pagos de manera segura y sin inconvenientes.
Ballester subrayó que esta iniciativa busca reducir los riesgos asociados al uso de dinero en efectivo, como la posibilidad de corrupción, errores en las transacciones y problemas de seguridad. "No procede manejar dinero en efectivo, sobre todo cuando puede haber volúmenes importantes de dinero, por razones de seguridad, de la cultura en el dinero, mitigación de riesgos", afirmó.
Hasta el momento, la implementación del sistema no ha generado mayores dificultades ni ha afectado los tiempos de espera. "No tuve mayores reportes de algunos inconvenientes", agregó.