Martínez Pozo: clima regional hacía “incómoda” la celebración de la Cumbre en 2025

El coordinador del programa El Sol de la Mañana, Julio Martínez Pozo, calificó como “razonable y apropiada” la decisión de posponer para 2026 la Décima Cumbre de las Américas, que originalmente se celebraría en la República Dominicana.

Durante su comentario de este martes, Martínez Pozo afirmó que la medida fue consensuada entre los países involucrados y que responde a un contexto regional, “marcado por tensiones políticas y militares que hacían incómoda la celebración del evento”.

“Yo creo que esta decisión es razonable, es apropiada y sé que fue una decisión consensuada, porque el clima que se ha creado en la región es realmente incómodo para la celebración de una cumbre”, sostuvo el comunicador.

Factores de incidencia

Martínez Pozo explicó que entre los factores que influyeron en el aplazamiento figura la militarización del Caribe por parte de Estados Unidos, bajo el alegato de frenar el narcotráfico procedente de Venezuela, aunque, según advirtió, detrás de esa medida se ocultan intereses geopolíticos.

“Eso es el alegato, pero sabemos que detrás de todo está el interés por derrocar el régimen dictatorial que se ha enseñoreado ahí y que ha llevado ese país a una ruina total”, expresó en su análisis.

El comunicador recordó que más de siete millones de venezolanos han tenido que emigrar debido a la crisis interna de su país, lo que, a su juicio, complica aún más el panorama regional.

Asimismo, el coordinador de El Sol de la Mañana consideró que la ruptura de relaciones diplomáticas entre Perú y México sumó otro elemento de tensión a la región. Sostuvo que el gobierno peruano tomó la decisión luego de que México otorgara asilo político a una exministra del expresidente Pedro Castillo, lo que Lima consideró una injerencia directa.

“Eso fue el punto que llevó al gobierno de Perú a romper relaciones con México. Pero ese gobierno de Perú, a su vez, es un gobierno provisorio, que busca legitimidad”, explicó.

Otros escenarios

El analista también mencionó los casos de Nicaragua, Cuba y Haití, países que, aunque no son el centro de atención de la Cumbre, forman parte de un entorno regional complejo.

El apoyo de Estados Unidos

Martínez Pozo destacó además el respaldo expresado por el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, quien agradeció al presidente Luis Abinader su disposición para ser anfitrión del evento y apoyó plenamente la decisión de postergarlo.

Apoyamos plenamente la decisión de posponer la cumbre y seguiremos colaborando con la República Dominicana y otros países de la región para planificar un evento productivo en 2026”, citó el comunicador sobre el mensaje del funcionario estadounidense.

El comentarista reiteró que la Cumbre de las Américas constituye un instrumento de política exterior de los Estados Unidos, y que por ello la decisión de aplazarla no pudo haber sido tomada sin su participación y anuencia.

Finalmente, insistió en que celebrar una cumbre “deslucida” habría sido un error, y que la posposición permitirá realizar un encuentro “con toda la lucidez y trascendencia que merece”.

“Para hacer una cumbre deslucida, que no tenga la trascendencia que debe tener, es preferible esperar y desarrollarla en otro ambiente. Fue una decisión oportuna”, concluyó Julio Martínez Pozo.