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La dirigente opositora venezolana María Corina Machado no pudo asistir este miércoles a la ceremonia del Premio Nobel de la Paz, pero el Instituto Nobel Noruego confirmó que la galardonada se encuentra “a salvo” y prevé que llegue a Oslo “en las próximas horas”, tras atravesar lo que describieron como “un viaje en situación de peligro extremo”. Su hija, Ana Corina Sosa Machado, recibió el reconocimiento y leyó el discurso en su nombre.
La ausencia de Machado había generado incertidumbre durante la semana, luego de que los organizadores advirtieran inicialmente que desconocían su paradero. En un comunicado oficial, el Instituto Nobel señaló que “la Premio Nobel de la Paz ha hecho todo lo posible por acudir hoy a la ceremonia. Aunque no podrá estar en los eventos del día, estará con nosotros en Oslo”.
La ceremonia, celebrada en el Ayuntamiento de Oslo y encabezada por los reyes Harald y Sonja de Noruega, contó con la presencia de líderes latinoamericanos, entre ellos los presidentes Javier Milei (Argentina) y Daniel Noboa (Ecuador).
En el mensaje leído por su hija, Machado dedicó el galardón “a todo el pueblo de Venezuela” y a los “héroes que luchan por la libertad”, así como a los líderes internacionales que respaldaron su causa. La opositora —la primera venezolana en recibir el Nobel de la Paz— agradeció el reconocimiento del Comité, que en octubre destacó sus “incansables esfuerzos para promover los derechos y libertades” y su contribución a una “transición justa y pacífica hacia la democracia”.
“Este es el logro de un movimiento, de una sociedad”, expresó en referencia al anuncio original del premio, cuando afirmó que lo recibía “con humildad” y en nombre de Venezuela.
La presencia de Machado en Oslo había sido anunciada con anticipación, pero su salida de Venezuela estaba rodeada de riesgos. Desde finales de 2024, la líder opositora se mantenía en la clandestinidad tras la ola represiva que siguió a las protestas por los resultados electorales del 28 de julio de 2024, que dejaron más de 2,000 detenidos.
Machado no aparecía en público desde el 9 de enero de 2025, cuando encabezó una manifestación en Caracas contra la juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato. Pesa sobre ella una prohibición de salida del país desde 2014, aunque nunca fue procesada penalmente.
Pese a esta restricción, funcionarios del gobierno habían insinuado días atrás que Machado logró abandonar el país. El ministro del Interior, Diosdado Cabello, afirmó en televisión estatal: “La vamos a extrañar”, y aseguró que su salida ocurrió “sin drama, pura logística”.
La dirigente se convirtió en figura clave de la oposición desde 2003 con la organización Súmate, impulsora del referendo revocatorio contra Hugo Chávez. En 2010 fue electa diputada y dos años después protagonizó un célebre intercambio con el mandatario: “Expropiar es robar”, le dijo entonces Machado.
En 2023 ganó la candidatura unitaria de la oposición, aunque fue inhabilitada para competir en las elecciones del 28 de julio de 2024, donde apoyó al diplomático Edmundo González Urrutia, a quien la oposición adjudica el triunfo con el 66% de los votos, pese a que el Consejo Nacional Electoral proclamó a Maduro sin exhibir las actas.
Desde enero de 2025, todo contacto con Machado se mantenía a través de redes sociales o videoconferencias.