
La exvicepresidenta de la República, Margarita Cedeño, advirtió que el caso que involucra al Seguro Nacional de Salud (Senasa) podría constituir una estructura delictiva que afecta directamente a los sectores más vulnerables de la población, si se confirman las acusaciones presentadas por el Ministerio Público.
En un artículo de opinión, la dirigente política sostuvo que no se estaría ante simples irregularidades administrativas ni ante un desorden heredado, sino frente a un mecanismo diseñado para desviar recursos públicos. A su juicio, la gravedad del caso exige una lectura que vaya más allá de explicaciones coyunturales.
Cedeño, miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), basó su análisis en las informaciones publicadas por distintos medios, describiendo el proceso como una combinación de silencios institucionales, ambiciones desmedidas, ausencia de auditorías oportunas, fallas en los controles internos y una posterior judicialización del conflicto.
La exvicepresidenta subrayó que el caso pone en evidencia una debilidad estructural en Senasa, citando observaciones de la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril) sobre procesos fragmentados, manejo manual de procedimientos, deficiencias en la trazabilidad y falta de controles automáticos eficaces.
En ese contexto, planteó la necesidad de una reforma institucional profunda, proponiendo cinco ejes fundamentales: trazabilidad digital obligatoria en tiempo real, auditorías permanentes, transparencia activa en las contrataciones, protección efectiva a los afiliados y una rendición de cuentas que evite la impunidad.
De acuerdo con una nota de prensa, Cedeño advirtió que cualquier afectación a Senasa impacta directamente la confianza de los afiliados, quienes podrían dudar si una negación de servicios responde a limitaciones de cobertura o a un uso indebido de los fondos.
En su artículo, titulado «El seguro de todos o el botín de unos pocos», la exvicepresidenta cuestionó no solo quiénes habrían cometido irregularidades, sino también cómo se permitió o toleró un modelo de gestión con controles tardíos e ineficientes.
Finalmente, afirmó que Senasa puede superar esta crisis solo mediante cambios estructurales reales, con controles modernos, auditorías independientes, acceso público a la información y una justicia aplicada sin selectividad, al advertir que cuando el sistema de salud se convierte en un botín, el ciudadano termina pagando las consecuencias con sus impuestos y con su vida.