
EFE.- El Supremo de Estados Unidos falló este jueves en contra de permitir que se usen fondos del Gobierno para subvencionar un colegio católico.
La decisión fue anunciada en un documento de una página, señalando solamente que ocho magistrados de la corte estaban divididos por la mitad en la decisión y la novena, Amy Coney Barrett, se recusó del caso.
El Supremo, por lo tanto, mantuvo en pie la decisión de una corte en menor instancia donde se concluyó que la escuela católica San Isidoro de Sevilla en Oklahoma no podría estar afiliada con ninguna religión al ser una institución concertada y recibir financiamiento del Gobierno.
Albares le solicitó a Rubio que utilice su influencia sobre Israel para alcanzar ese objetivo, dado que, dijo, «Estados Unidos es un país importantísimo, fundamental en el mundo, con un gran peso político y diplomático».
El ministro descartó este jueves llamar a consultas a la embajadora española en Israel para forzar al Gobierno israelí a frenar la ofensiva en Gaza, pero negó que Estados Unidos haya influido en esa decisión: «España tiene una política exterior con identidad propia que es soberana», declaró.
El encuentro se produjo un día después de que el Ejército israelí disparara en un campo de refugiados de Cisjordania ocupada contra un grupo de diplomáticos árabes y europeos, entre ellos un español, un hecho que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, calificó de «accidente».
Durante la reunión, tanto Rubio como Albares condenaron el asesinato, la noche anterior, de dos trabajadores de la Embajada de Israel en Estados Unidos, quienes fueron tiroteados a las puertas del Museo Judío de Washington por un hombre que gritó «Palestina libre» al ser capturado.
Al inicio del encuentro en el Departamento de Estado, Rubio expresó ante la prensa sus condolencias a las familias de las víctimas, definió al agresor como un «radical» y apuntó que el crimen demuestra «el nivel de radicalización» que hay en el país.
«Trasladé tanto mi pésame como mi condena tajante por esos asesinatos. Desde luego, el antisemitismo y la barbarie, eso es lo que ocurrió ayer aquí en Washington, tiene toda nuestra condena», explicó luego Albares en su rueda de prensa.
Los dos diplomáticos abordaron además la guerra en Ucrania, y el ministro español subrayó «la importancia de conseguir una paz justa y duradera en Ucrania», dado que «la seguridad ucraniana está íntimamente y estrechamente ligada a la seguridad europea».
Rubio insistió en la posición de Estados Unidos de que los aliados de la OTAN, como España, deben elevar su gasto en defensa al 5 % del PIB, mientras que Albares apuntó que su país ha hecho un «enorme esfuerzo» por alcanzar el 2 % y que «el debate en estos momentos tiene que centrarse en capacidades».
«Ha habido un intercambio y cada uno ha expresado sus puntos de vista con mucha claridad», resumió.
Albares y Rubio coincidieron por última vez en la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN, celebrada en Bruselas los pasados 3 y 4 de abril, y mantuvieron una conversación telefónica la víspera de ese encuentro, en la que abordaron las relaciones bilaterales y la cooperación en seguridad y comercio, justo antes de que Trump anunciara su plan global de aranceles.
En ese intercambio, señalaron no haber tratado el aumento del gasto en defensa que Estados Unidos reclama a sus aliados. La próxima cumbre de la OTAN tendrá lugar en La Haya los días 24 y 25 de junio, y los líderes aliados esperan acordar un nuevo objetivo de gasto en defensa.