El secretario de Estado de los Estados Unidos Marco Rubio emprenderá desde este miércoles una gira diplomática por Jamaica, Guyana y Surinam con el objetivo de contrarrestar la creciente presencia de Venezuela y China en la región. Además, sostendrá reuniones bilaterales con los líderes de Barbados, Trinidad y Tobago y Haití, país sumido en una crisis institucional prolongada.
El gobierno de Nicolás Maduro busca afianzar su reclamo sobre la región de Esequibo en Guyana mediante la elección de un gobernador en ese territorio rico en petróleo. Por su parte, China ha extendido su influencia en el Caribe a través de inversiones y acuerdos comerciales estratégicos.
En Haití, la falta de estabilidad política ha permitido la expansión del narcotráfico y el tráfico de armas. Para el Departamento de Estado, es prioritario avanzar en una transición democrática en el país.
“La situación es muy grave en Haití. El secretario Rubio es muy consciente de que es una estrategia en desarrollo. Creo que este viaje también estará orientado a escuchar las opiniones de nuestros vecinos y aliados en el Caribe para ver qué creen que es posible y cómo pueden colaborar con nosotros en este sentido,” señaló Mauricio Claver-Carone, exasesor de Donald Trump para América Latina.
Añadió además: “Este viaje contribuirá para asegurar que estas pandillas no se apoderen de Puerto Príncipe. También ha sido una preocupación de larga data que en algunas islas del Caribe hay mucho movimiento no solo de ciudadanos chinos, sino también de ciudadanos iraníes y de otros países, que afecta no solo la seguridad nacional de Estados Unidos, sino, francamente, la seguridad de estas islas. Este también será un tema de conversación.”
La parada en Guyana tiene un fuerte componente geopolítico, dado el aumento de las tensiones con Venezuela. Maduro ha intensificado su retórica sobre la anexión de Esequibo, siguiendo un esquema similar al de Vladimir Putin con algunas regiones de Ucrania. Con este fin, Caracas ha convocado elecciones para gobernador en el territorio el próximo 25 de mayo.
El régimen venezolano se ampara en el Acuerdo de Ginebra de 1966, mientras que Guyana sostiene que el laudo arbitral de 1899 define sus actuales fronteras. En este contexto, el presidente guyanés, Irfaan Alí, rechazó una reunión con Maduro, pero sí recibirá a Rubio en Georgetown.
“Guyana tiene una gran oportunidad. Nos centraremos en la cooperación en seguridad y en cómo podemos impulsar el acuerdo de mayor cooperación en seguridad con Guyana, similar a lo que estamos trabajando con algunos de los países del Golfo. En ese sentido, creo que existe una gran oportunidad para el desarrollo y la seguridad de Guyana, particularmente ante las amenazas impuestas por Venezuela,” explicó Claver-Carone en una conferencia del Departamento de Estado.
También subrayó la importancia del respaldo regional: “Debido a la extorsión del régimen venezolano sobre estas islas del Caribe, el hecho de que hoy, en relación con estas intrusiones del gobierno venezolano sobre la soberanía y la soberanía territorial de Guyana, el hecho de que el Caribe se una a su socio caribeño, Guyana, contra las amenazas de Venezuela, es extraordinario.”
Rubio concluirá su gira el jueves por la noche y regresará a Washington. Además de abordar la influencia de Venezuela y China, el senador enfocará su agenda en la inmigración irregular y la cooperación económica entre Estados Unidos y el Caribe.