El Manchester City sumó su quinta derrota consecutiva en todas las competiciones al caer estrepitosamente 4-0 ante el Tottenham este sábado, en un partido que marcó un nuevo capítulo en la crisis que atraviesa el equipo dirigido por Pep Guardiola.
Lo que inició como una jornada de expectativas para el cuádruple campeón defensor de la Premier League, terminó siendo una de las peores goleadas recibidas en la era del técnico español, poniendo en peligro su temporada.
"Yo diría que cuando pierdes tres partidos seguidos de la Liga Premier, lo incorrecto es decir que vamos a ser campeones", dijo Guardiola. "Pero la realidad es esta, tenemos que hacerlo chicos. Tenemos que romper (la racha), empezar a ganar partidos".
La afición del Estadio Etihad quedó en silencio tras los dos goles tempraneros de James Maddison en los primeros 20 minutos, opacando el espectáculo de luces que había precedido al partido en honor al Balón de Oro ganado por el mediocampista Rodri.
La semana parecía festiva para el Manchester City, con la reciente renovación de contrato de Pep Guardiola por dos años, pero la goleada sufrida resaltó los graves problemas que el técnico enfrenta en el terreno de juego.