
Un fuerte temporal de lluvias en el norte y oeste de la provincia de Buenos Aires provocó inundaciones que dejaron al menos 4,100 evacuados, afectaron a 30 municipios y mantienen la búsqueda de cuatro personas desaparecidas, según autoridades locales.
El Servicio Meteorológico Nacional de dicho país informó este domingo que cesaron las alertas climáticas, lo que permitió que algunas familias comenzaran a regresar a sus hogares. Sin embargo, las zonas afectadas aún registran importantes anegamientos, con acumulaciones de hasta dos metros de agua en algunas localidades.
Defensa Civil confirmó que las personas desaparecidas corresponden a los distritos de Rojas, Baradero y Quilmes. Equipos de rescate continúan los operativos de búsqueda con apoyo aéreo y terrestre.
El gobierno provincial, encabezado por Axel Kicillof, y el Ejecutivo nacional, liderado por Javier Milei, desplegaron recursos de emergencia, asistencia humanitaria y operativos de seguridad. Las Fuerzas Armadas, junto con la Policía Federal y la Agencia Federal de Emergencias, colaboran en tareas de rescate y control en las zonas afectadas.
En total, más de 66 toneladas de alimentos, 3,500 colchones, frazadas, agua potable y kits de limpieza han sido distribuidos entre los damnificados. Ocho rutas permanecen cerradas por inundaciones mientras avanzan las tareas de evaluación de daños y planificación de reconstrucción.