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El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este domingo que durante el año 2025 triunfó lo que denominó la “lealtad suprema” de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), en un contexto marcado por tensiones con Estados Unidos a raíz del despliegue militar que Washington mantiene desde agosto en el Caribe.
Las declaraciones fueron ofrecidas durante el acto de salutación de fin de año a la FANB, celebrado en la Academia de la Armada Venezolana, ubicada en el estado La Guaira, y transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión.
En ese escenario, Maduro aseguró que la institución castrense se mantuvo fiel al proyecto bolivariano, a su comandante en jefe y a lo que calificó como el “destino de la patria”.
El mandatario insistió reiteradamente en el concepto de lealtad y sostuvo que esta debe mantenerse “en todo momento y a toda prueba”, en referencia directa al papel de los militares frente a los desafíos que, según su discurso, enfrenta el país.
Durante su intervención, Maduro señaló que Venezuela ha permanecido durante 27 semanas “amenazada por Goliat”, en alusión al despliegue aeronaval de Estados Unidos en el sur del Caribe. Calificó esta presencia como un “crimen” y rechazó lo que considera intentos de intimidación contra el país.
Según el Gobierno venezolano, dicho despliegue representa una amenaza a la soberanía nacional, aunque Washington sostiene que la operación tiene como objetivo el combate al narcotráfico en la región. Maduro reiteró que, pese a estas tensiones, la FANB se encuentra “más preparada que nunca” para garantizar la paz, la soberanía y la integridad territorial.
No obstante, Maduro indicó que la Fuerza Armada debe “hacer más” en materia de defensa nacional, en el marco de lo que definió como la preparación para una “resistencia popular prolongada, activa y letal”. Durante el acto, el mandatario recibió un fusil como reconocimiento a su rol de comandante en jefe.