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El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, nombró como nuevo titular del Ministerio de Comunicaciones al diputado Pedro Lucas Fernandes, quien es el actual vocero del partido de centroderecha União Brasil en la Cámara de Diputados. Esta designación se produce tras la renuncia de José Juscelino Filho, quien ha sido acusado de corrupción por la Fiscalía.
El anuncio fue realizado por la ministra de la Presidencia, Gleisi Hoffmann, después de una reunión entre Lula y dirigentes de União Brasil, incluido el propio Fernandes.
«União Brasil propuso a Pedro Lucas como ministro, y el presidente aceptó e invitó a asumir el cargo», indicó Hoffmann, añadiendo que el diputado asumirá sus funciones después de Semana Santa, debido a compromisos personales.
Fernandes pertenece al mismo partido y estado (Maranhão) que su antecesor, pero mantiene una relación más cercana con el gobierno de Lula, ya que fue aliado del exgobernador Flávio Dino, una figura destacada del Partido Comunista y exministro de Justicia.
Unión Brasil, que ejerce una fuerte influencia en el Congreso, cuenta con dos ministros en el actual gabinete y desempeña un papel clave en la aprobación de las iniciativas del Ejecutivo. Entre sus figuras destacadas se encuentran Davi Alcolumbre, presidente del Senado, y Arthur Lira, expresidente de la Cámara de Diputados.
Juscelino Filho presentó su renuncia tras ser acusado de desviar fondos públicos durante su tiempo como diputado federal. En su despedida, aseguró que su salida era un gesto de "respeto al gobierno y al pueblo brasileño" y manifestó su intención de defenderse fuera del gabinete.
A los 45 años, Fernandes está cumpliendo su segundo mandato como diputado federal. Proviene de una familia con trayectoria política en Maranhão y anteriormente dirigió la Agencia Ejecutiva Metropolitana de São Luís durante la administración regional de Flávio Dino. Su carrera comenzó en 2013 como concejal en la capital maranhense por el Partido Laborista Brasileño (PTB).
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