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Luka Dončić protagonizó una noche histórica este viernes, al romper su propio récord personal y liderar a los Los Angeles Lakers hacia una impresionante victoria por 128-110 sobre los Minnesota Timberwolves. Con una actuación arrolladora de 48 puntos, 11 rebotes y 8 asistencias, el astro esloveno brilló en cada rincón de la cancha, demostrando por qué es uno de los mejores jugadores de la NBA.
En su mejor partido de la temporada, Dončić rompió su marca de anotación en un encuentro de temporada regular, superando su anterior récord y dejando una huella imborrable en la franquicia angelina. En apenas 18 minutos de acción, acumuló 32 puntos, marcando la diferencia en la primera mitad y mostrando una actitud inquebrantable tras la derrota inicial de los Lakers ante los Golden State Warriors.
A pesar del temprano dominio de los Timberwolves, que comenzaron liderando el encuentro, los Lakers reaccionaron rápidamente. Con un fuerte rendimiento de Austin Reaves, quien sumó 25 puntos, 11 asistencias y 7 rebotes, el equipo de Los Ángeles se llevó la ventaja al final del primer cuarto (25-21).
La ausencia de LeBron James, quien se recupera de un problema de ciática, dejó el camino libre para que Dončić y Reaves se lucieran, mientras los Timberwolves, comandados por Anthony Edwards (31 puntos) y Julius Randle (26 puntos), luchaban por mantenerse en el partido.
El choque entre ambos equipos se convirtió en un duelo de toma y daca, especialmente en el segundo cuarto, que concluyó con una ligera ventaja para los Lakers (68-63). Dončić, al descanso, ya era el máximo anotador del partido con 32 puntos, más del doble que su compañero Reaves (12) y que Edwards (15).
En el tercer cuarto, los Lakers demostraron su mejor versión, extendiendo su ventaja a 14 puntos y cerrando el parcial 108-94. Con este dominio, el equipo consolidó su control del encuentro, y el último cuarto sirvió solo para reafirmar su victoria.
Este triunfo no solo significó una recuperación para Los Ángeles tras la eliminación sufrida ante los Timberwolves en los pasados playoffs, sino también un mensaje claro de que el equipo está listo para luchar por nuevos objetivos bajo la dirección de JJ Redick.
En otro encuentro destacado de la jornada, los Toronto Raptors cayeron 116-122 ante los Milwaukee Bucks en el primer juego de la temporada en casa. Giannis Antetokounmpo fue la estrella indiscutible, con 31 puntos, 20 rebotes y 7 asistencias, liderando a los Bucks en una victoria ajustada.
Brandon Ingram brilló por los Raptors, anotando 29 puntos, 9 de ellos desde el arco, junto con 6 rebotes y 3 asistencias. A pesar de un gran esfuerzo individual de Ingram, los Bucks lograron imponerse con una destacada actuación de Antetokounmpo y un aporte importante desde el banquillo de Cole Anthony (23 puntos y 7 asistencias).
El partido comenzó con ventaja para los Bucks, que dominaron el primer cuarto gracias a la eficacia de Antetokounmpo, pero los Raptors respondieron en el segundo, tomando la delantera al descanso (54-52). La igualdad se mantuvo en la segunda mitad, y con el marcador empatado 86-86 al inicio del último cuarto, los Bucks terminaron por imponerse gracias a su mayor acierto en los minutos finales.
Este resultado dejó a los Raptors con una victoria y una derrota en lo que va de temporada, mientras que los Bucks, también con balance de 1-1, se mantienen firmes con su estrella griega al frente.