
El presidente Luis Abinader advirtió este martes que la situación en Haití ha dejado de ser una cuestión migratoria y se ha transformado en un problema de seguridad nacional para la República Dominicana, debido al avance y control que ejercen las bandas criminales en gran parte del territorio haitiano.
“Nosotros no tenemos un problema migratorio. Tenemos un problema de seguridad nacional con el tema haitiano”, declaró el mandatario, subrayando que cerca del 90 % del sur de Haití está bajo dominio de grupos armados, especialmente en zonas como Puerto Príncipe.
Abinader alertó que estos grupos ya operan en regiones cercanas a la frontera, como Caobas y Mirebalais, ubicadas en el departamento de Artibonite, a unos 60 kilómetros del territorio dominicano. “Ya han llegado al centro de Haití”, dijo, durante su intervención en el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio.
Relaciones con Haití se han deteriorado
Las relaciones entre República Dominicana y Haití han experimentado un deterioro significativo en los últimos años. Este fenómeno ha sido motivo de preocupación tanto para los ciudadanos como para los gobiernos de ambos países.
Entre las principales causas del deterioro se encuentran las tensiones políticas, los problemas económicos y las diferencias culturales. La falta de un diálogo efectivo ha exacerbado la situación, impidiendo que se logren acuerdos beneficiosos para ambas naciones.

Al hablar sobre el enfoque de su gestión desde 2020, el presidente recordó que en sus primeros meses trató de establecer un canal de diálogo con el expresidente Jovenel Moïse. “Lo primero que hice fue tratar de encauzar un diálogo con el entonces presidente Jovenel Moïse”, afirmó.
No obstante, el asesinato de Moïse en 2021 marcó un giro. “A partir de ahí ha habido un deterioro progresivo de la seguridad en Haití. No hay una situación tan difícil como la que enfrentamos actualmente”, expresó.
Convocatoria a una visión común
El jefe del Estado pidió a todos los sectores nacionales dejar de lado diferencias políticas y asumir la crisis haitiana desde una óptica de interés nacional. “Esto no es un tema migratorio puro y sencillo, es un tema de seguridad nacional”, insistió.
Valoró además el respaldo de los expresidentes Leonel Fernández, Danilo Medina e Hipólito Mejía, a quienes agradeció por su "sentido patriótico", reflejado en la participación de sus delegados en las reuniones convocadas por el Consejo Económico y Social (CES).
Finalmente, anunció que las consultas con actores políticos y sociales concluirán esta semana, para pasar luego a la evaluación de propuestas orientadas a reforzar la seguridad nacional.