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La condición de salud del expresidente brasileño Jair Bolsonaro es estable, afirmaron sus médicos el viernes, un día después de que se reportó un deterioro. Sigue en cuidados intensivos después de someterse a una cirugía intestinal hace casi dos semanas.
El expresidente tenía presión arterial elevada y resultados de laboratorio hepáticos empeorados es estable indicó el equipo médico del Hospital DF Star en Brasilia, agregando que la salud del expresidente Bolsonaro es estable, de acuerdo a sus médicos.
A través de la actualización del viernes, el cuerpo médico dijo que su presión arterial se había estabilizado y que pruebas de imagen adicionales no mostraron complicaciones, descartando la necesidad de una nueva cirugía.
Bolsonaro se sometió a una cirugía de 12 horas el 13 de abril para eliminar adherencias intestinales y reconstruir la pared abdominal. Fue el sexto procedimiento relacionado con los efectos de largo plazo de un apuñalamiento en el abdomen durante un mitin de campaña en septiembre de 2018.
Ha entrado y salido de hospitales desde el ataque y se sometió a múltiples cirugías durante su presidencia de 2019 a 2022.
Los médicos describieron la más reciente cirugía como la "más compleja" desde el apuñalamiento, ya que iba a requerir un "postoperatorio muy delicado y prolongado".
No hay una fecha prevista para establecer el alta de cuidados intensivos, según el comunicado del viernes. Desde el informe médico inicial, los médicos han desaconsejado las visitas a Bolsonaro.
Sin embargo, el presidente de su Partido Liberal, Valdemar Costa Neto, lo visitó el martes. Más tarde ese día, Bolsonaro apareció en una transmisión en vivo en el canal de YouTube de su hijo mayor, el senador Flavio Bolsonaro.
Y el lunes, el líder de extrema derecha dio una entrevista desde su cama de hospital a la cadena de televisión local SBT, diciendo que su juicio no era técnico sino político.
En respuesta, una oficial del Supremo Tribunal Federal fue a la habitación del hospital de Bolsonaro el miércoles para notificarle formalmente el inicio de su juicio por un presunto intento de golpe de Estado.
Bolsonaro compartió un video de la notificación del oficial de la corte, donde se veía al expresidente cuestionándola. Parecía agitado, y alguien en la habitación —aparentemente un miembro de su equipo médico— advirtió que su presión arterial estaba subiendo.
La funcionaria de la corte dijo en el video que la orden había sido emitida el 11 de abril, el mismo día que Bolsonaro ingresó al hospital con dolor abdominal.
