En la actualidad existe un gran porcentaje de dominicanos que se han lanzado al mundo del emprendimiento, aprovechando la brecha digital utilizando plataformas como Marketplace y
redes sociales para impulsar y vender sus productos en las denominadas "tiendas online" o "comercios informales físicos".
Uno de los principales desafíos que enfrentan estos comerciantes es el acceso limitado a financiamiento y recursos que les permitan expandirse y mejorar sus operaciones.
La falta de un registro formal los excluye de beneficios como préstamos bancarios a tasas preferenciales, asesoría empresarial y programas de capacitación que podrían facilitar su crecimiento y estabilidad en el mercado.
A pesar de estas dificultades, muchos emprendedores han encontrado maneras creativas de sortear los obstáculos, utilizando métodos alternativos de financiación como el capital semilla de familiares o pequeños inversores privados, además de recurrir a estrategias de marketing digital para ampliar su clientela sin incurrir en altos costos.
El potencial de estos comercios informales es innegable, y aunque representan un sector dinámico y en crecimiento dentro de la economía dominicana, el reto se mantiene en cómo lograr una integración adecuada que beneficie tanto a los emprendedores como al desarrollo económico del país.
Los comerciantes informales manifiestan que se encuentran desamparados por el sistema ya que el porcentaje de los impuestos que tienen que pagar al estado los dejan sin capital, en muchas ocasiones y que el formalizarse no es tan fácil como lo pintan, así comenta Mariel Rivera, quien es propietaria de una tienda física de ropa.
"Tengo que duplicar y hasta triplicar el precio de una prenda de ropa para poder ganarle algo", expresó al tiempo que agregaba que no es tan solo el pago de los impuestos, también, se suman los servicios adicionales que también tienen un porcentaje de impuestos sobre la renta.
Si bien es cierto que el Ministerio de Industria y Comercio ha realizado diversas conferencias para orientar e instruir a los comerciantes informales, dando oportunidad de reconocimiento a través de convenciones y publicidad auspiciadas por el estado fomentando el crecimiento, el descontento esta presente en una gran cantidad de comerciantes que se resisten al debido registro.
Existen múltiples comercios en esta misma situación, ubicadas en plazas comerciales reconocidas del gran
Santo Domingo, operando de manera irregular.
Es de conocimiento publico que la DGII mantiene una firme posición ante los comercios que no están
debidamente registrados ya que se considera como una violación ante la ley y se contempla como
evasión de impuestos por parte de los comercios que no están debidamente registrados lo que es penado ante la justicia dominicana.
El gobierno ha creado una serie de programas de ayuda a través del Ministerio de industria, Comercios y MiPymes (MICM) bajo la dirección de Víctor Bisonó Haza quien invita a los todos los comerciantes que no tienen registro a regular su estatus incentivando el formal registro ante la DGII.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPymes) 2022-2023, el
85.2 % de ellas en la República Dominicana es informal.
Los resultados fueron presentados por el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu; y el ministro de Industria, Comercio y MiPymes, Víctor Bisonó.
“El 14.8 % de las MiPymes está registrado como formal, es decir, empresas con Registro Nacional de
Contribuyentes (RNC), en tanto que el 85.2 % restante fueron tipificadas como informales", explicó el
gobernador del Banco Central.La DGII se mantiene firme y exhorta a los comerciantes a formalizarse con el RNC para el reporte anual, señalando que si no lo hacen deben atenerse a las consecuencias legales.
Cabe recalcar que en República Dominicana, si no se registra un comercio con RNC se puede incurrir en multas y otras sanciones por las autoridades de la DGII.