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La Casa del Pueblo en Puerto Plata fue escenario de una masiva asamblea informativa, encabezada por el diputado de la patria, doctor Juan Carlos Quiñones, aspirante a la presidencia provincial de la Fuerza del Pueblo, y del miembro de la Dirección Central, Francisco Lantigua, aspirante a la presidencia municipal. La actividad contó con una asistencia de dirigentes y presidentes de direcciones de base, quienes acudieron para conocer los lineamientos del Congreso Elector Manolo Tavárez Justo y ratificar su compromiso con una Fuerza del Pueblo grande, democrática e institucional.
Entre los participantes se destacaron los dirigentes Paul Brugal, David Cabrera, Bienvenido Durán, Socorro Gell, y el doctor Víctor Rosario, entre otros importantes líderes que impulsan una visión de renovación, apertura e institucionalidad en la provincia.
En contraste, sectores vinculados a la actual dirección provincial realizaron otra asamblea en el patio de la casa del exsenador Francis Vargas, presidente provincial y miembro de la Dirección Política. Su participación, pese a su condición de miembro de la Comisión Nacional Electoral, ha generado preocupación entre las bases, debido a la disposición estatutaria que prohíbe expresamente su involucramiento en actividades proselitistas durante el proceso electoral interno.
La Fuerza del Pueblo, en el marco del Congreso Elector Manolo Tavárez Justo y bajo la conducción del presidente Leonel Fernández, avanza en un proceso de renovación de sus estructuras provinciales y municipales en todo el país.
En provincias como Puerto Plata, el presidente Fernández ha manifestado su voluntad de que dichas estructuras sean conformadas mediante el consenso entre los liderazgos locales. No obstante, la realización de actividades paralelas, impulsadas por sectores enfrentados, envía señales contrarias al objetivo de unidad e institucionalidad.
Lo ocurrido en Puerto Plata evidencia que la Fuerza del Pueblo transita por un momento decisivo: dos asambleas simultáneas, dos estilos de liderazgo y una sola militancia que clama por respeto institucional y renovación real. En una coyuntura donde se define el rumbo del partido en la provincia, la militancia deberá escoger entre continuar bajo una estructura cuestionada o apostar por una nueva conducción comprometida con los principios que dieron origen a esta organización.