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Diversas celebridades estadounidenses y artistas de origen latino se han pronunciado en contra de las redadas migratorias llevadas a cabo por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Los Ángeles, calificándolas como “inhumanas” y expresando su apoyo a las protestas que han surgido en los últimos días.
La cantante Katy Perry también se manifestó en contra de las redadas, señalando la contradicción entre criminalizar a personas que históricamente han contribuido al desarrollo de la ciudad: “¿Cómo puede una ciudad construida sobre la cultura y el trabajo mexicano volverse contra quienes la han moldeado?”, cuestionó.
Por su parte la empresaria y figura televisiva Kim Kardashian declaró que los inmigrantes forman parte esencial de la vida en Los Ángeles y lamentó que estén siendo tratados como criminales. “Creciendo en Los Ángeles, he visto cuán profundamente los inmigrantes están integrados en el tejido de esta ciudad”, publicó en sus redes sociales.
Entre otros artistas que se sumaron a las críticas están el músico Phinneas O’Connell, quien asistió a las manifestaciones y denunció el uso de gases lacrimógenos por parte de las autoridades, y el actor Mark Ruffalo, quien vinculó las deportaciones con la desigualdad de clases.
Desde la comunidad latina, también se escucharon voces de protesta. La actriz Eva Longoria compartió un video en el que pidió mayor compasión hacia quienes migran en busca de una vida mejor. Criticó que las redadas estén ocurriendo en espacios cotidianos como fiestas, graduaciones y comercios, afectando a personas que, según dijo, no son criminales.
El actor Pedro Pascal publicó un video con banderas latinoamericanas en el que defendió el papel de los migrantes en la construcción de la ciudad. “No son criminales, son el corazón de Los Ángeles”, decía uno de los mensajes.
La cantante Chiquis Rivera realizó una transmisión en vivo junto a una abogada experta en migración para informar a la comunidad sobre sus derechos ante los operativos. Mientras tanto, Gloria Estefan expresó su preocupación por lo que calificó como una “pérdida de humanidad”, recordando haber presenciado la separación de una madre de su hijo durante un operativo de deportación.
Las protestas contra las redadas, que comenzaron el pasado viernes, continúan desarrollándose en distintas zonas del sur de California.