El destacado jardinero dominicano nuevamente no logró conectar un imparable el miércoles en la derrota 9-4 de los Mets de Nueva York ante los Medias Blancas de Chicago, lo que profundiza su difícil inicio de temporada.
Soto, quien firmó un contrato récord de 765 millones de dólares como agente libre en diciembre, está atravesando una racha preocupante. En 55 partidos, su promedio de bateo ha caído a .224, con apenas ocho cuadrangulares y 25 carreras impulsadas, cifras muy por debajo de lo que se esperaba tras su explosiva campaña anterior con los Yankees.
El miércoles, Soto se fue de 4-0 con una base por bolas y un ponche. “Hoy fue uno de esos días en los que no le pegó fuerte a la pelota, pero pienso que su base, su mitad inferior, estaba en una mejor posición”, comentó el mánager Carlos Mendoza, intentando mantener la confianza en su jugador.
La frustración se hizo evidente en el Citi Field, donde fue abucheado por los pocos aficionados que asistieron al juego, el cual fue reprogramado con poco aviso y adelantado a la 1:10 p.m. debido a la amenaza de lluvia.
Desde el sábado, cuando conectó un doble impulsor contra los Dodgers, Soto no ha conseguido un solo hit en sus últimos 16 turnos. Incluso fue retirado en una jugada confusa el martes por la noche, al ser declarado out por adelantar a Brandon Nimmo en las bases, en lo que parecía ser un imparable seguro.
Actualmente, Soto no ha conectado un jonrón desde el 9 de mayo; lleva una racha de 75 apariciones al plato sin cuadrangulares y batea apenas para .119 en sus últimos 59 turnos. Con corredores en posición de anotar, su promedio es de .130 (6 hits en 46 turnos), con solo un jonrón y 16 carreras impulsadas.
Estas cifras contrastan drásticamente con su rendimiento del año pasado, cuando, con los Yankees, sumó 41 jonrones, 109 carreras impulsadas y un OPS de .989, además de terminar tercero en la votación al Jugador Más Valioso de la Liga Americana.