
Irán ha acordado permitir la entrada de un equipo técnico del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en los próximos días, con el fin de discutir la posible restauración de la vigilancia mediante cámaras en sus sitios nucleares. Así lo informó Rafael Mariano Grossi, director del organismo, quien calificó el gesto como una señal alentadora con respecto a las negociaciones nucleares con Estados Unidos.
Grossi ofreció estas declaraciones en Washington después de haber mantenido una serie de reuniones en Teherán la semana pasada. Según explicó, los líderes iraníes mostraron una actitud comprometida y un interés genuino en alcanzar un acuerdo. “Esa es mi impresión”, afirmó.
La reanudación de las conversaciones ocurre en un contexto en el que Irán busca el alivio de las sanciones económicas, mientras que Estados Unidos intenta asegurar que el país persa no desarrolle armas nucleares. Aunque el OIEA no participa directamente en las negociaciones, desempeñará un papel clave en la verificación de cualquier compromiso alcanzado.
El acceso del OIEA a los sitios nucleares iraníes se vio severamente restringido después de que el expresidente Donald Trump retirara a EE.UU. del acuerdo nuclear de 2015. Desde entonces, Irán ha enriquecido y almacenado uranio a niveles más cercanos al grado armamentístico, aunque sus autoridades insisten en que sus actividades tienen fines civiles.
El líder supremo iraní, Alí Jamenei, no ha dado la orden de avanzar hacia la fabricación de armas nucleares, según la información actual. Sin embargo, ante las recientes amenazas de posibles ataques por parte de Israel o Estados Unidos, Irán ha retomado los contactos diplomáticos.
Grossi subrayó que, aunque su agencia no está implicada directamente en las negociaciones entre Washington y Teherán, el OIEA será indispensable para verificar la implementación de cualquier acuerdo que pueda alcanzarse. “No puedo imaginar cómo se podría inspeccionar a Irán sin la experiencia del OIEA”, concluyó.