Iglesia Luterana de Noruega pide perdón a la comunidad LGTBI por décadas de exclusión

Tveit destacó que la disculpa llega tras una reflexión profunda y agradeció a quienes han promovido la igualdad en Noruega, un país pionero en legalizar uniones civiles homosexuales desde 1993.

El presidente de la Iglesia Evangélica Luterana de Noruega, Olav Fykse Tveit, ofreció este jueves una disculpa pública a la comunidad LGTBI del país por el dolor y la exclusión que la institución religiosa les provocó durante décadas.

Durante un emotivo discurso en el bar London de Oslo, un reconocido punto de encuentro para el colectivo LGTBI, el líder religioso reconoció los errores históricos de la Iglesia y asumió su responsabilidad ante la sociedad.

“La Iglesia noruega ha causado vergüenza, gran daño y dolor a las personas homosexuales. Eso no debería haber ocurrido. Por eso hoy digo: ¡Perdón!”, declaró Fykse Tveit.

El también obispo principal de la religión mayoritaria del país enumeró los principales agravios cometidos, entre ellos la prohibición a las parejas del mismo sexo de casarse o trabajar dentro de la Iglesia, así como haber considerado en el pasado al VIH/sida como un castigo divino. Estas posturas, sostuvo, provocaron culpa, vergüenza y miedo entre muchas personas que fueron rechazadas por su orientación sexual.

“Esto ha llevado a que las personas homosexuales se sientan avergonzadas, como resultado de una narrativa predominante sobre lo que es correcto o incorrecto en el amor, y de la presión de la Iglesia para ocultar o negar quiénes eran”, afirmó el religioso.

Fykse Tveit subrayó que este acto de disculpa llega tras un proceso de reflexión profunda dentro de la institución:

“Algunos pueden pensar que es demasiado tarde, otros creen que es demasiado pronto. Nosotros creemos que es mejor no esperar más”.

El líder religioso aprovechó la ocasión para agradecer a quienes han contribuido a la transformación social y espiritual de Noruega, donde la igualdad y el respeto han ganado terreno en los últimos años.

“Una sociedad donde puedes amar a quien quieras y ser quien eres hace de Noruega y del mundo un lugar mejor. Por eso hoy también es oportuno decir: ¡Gracias!”, expresó.

Posteriormente, Fykse Tveit acudió a la Catedral de Oslo, donde se celebró una misa especial con la presencia del príncipe heredero Haakon y la princesa Mette-Marit, en respaldo a la reconciliación promovida por la Iglesia.

Cabe recordar que la Iglesia de Noruega, que en la década de 1950 consideraba la homosexualidad un “peligro social de alcance mundial”, dio un giro histórico en 2017 al aprobar el matrimonio eclesiástico entre personas del mismo sexo. Noruega fue además el segundo país del mundo en legalizar las uniones civiles homosexuales, en 1993, después de Dinamarca.