
La Iglesia católica hizo un llamado a la población dominicana a vivir las festividades navideñas con moderación, responsabilidad y un profundo sentido espiritual, recordando que la esencia de la Navidad es el nacimiento de Jesucristo y no el exceso material.
El exhorto fue realizado por el padre Cecilio de los Santos, vicario episcopal para el clero de la Arquidiócesis de Santo Domingo, y el padre José Luis de la Cruz, rector de la Universidad Católica de Santo Domingo, durante una entrevista en el programa Despierta con CDN.
Ambos sacerdotes coincidieron en que el tiempo de Adviento es una oportunidad para la reflexión, la reconciliación, la convivencia familiar y la solidaridad. Advirtieron, además, sobre los riesgos asociados a los excesos propios de la temporada, como el consumo desmedido de alcohol y la imprudencia al conducir, situaciones que cada año generan tragedias evitables.
“El centro de la Navidad debe ser siempre Jesús. Cuando se pierde ese enfoque, la celebración se vacía de su verdadero significado”, expresó el padre Cecilio, al recalcar la importancia de vivir estas fechas con conciencia y fe.
Por su parte, el padre José Luis de la Cruz destacó que la Navidad también invita al reencuentro familiar y a la serenidad interior, promoviendo una vida guiada por el equilibrio, el respeto y la responsabilidad personal.
Durante el diálogo, los representantes de la Iglesia alentaron a la ciudadanía a realizar una evaluación personal al cierre del año, reflexionando sobre los logros alcanzados, los errores cometidos y los propósitos para el nuevo período, como parte del crecimiento humano y espiritual.
Asimismo, reiteraron el compromiso de la Iglesia con los principales retos sociales del país, entre ellos la educación, la salud, la seguridad ciudadana y la defensa de la familia, considerada como el pilar fundamental de la sociedad.
Finalmente, subrayaron que la Iglesia continuará acompañando a los sectores más vulnerables y promoviendo valores cristianos y sociales que contribuyan a una sociedad más justa, solidaria y humana, especialmente en este tiempo de esperanza que representa la Navidad.