Este miércoles 5 de marzo, la comunidad católica en todo el mundo celebra el Miércoles de Ceniza, marcando el inicio de la Cuaresma, un periodo de 40 días de preparación espiritual antes de la Semana Santa.
Durante esta jornada, fieles acuden a los templos para recibir la imposición de ceniza en la frente, como símbolo de penitencia y reflexión.
El rito de la ceniza, elaborado a partir de la quema de los ramos bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior, se acompaña de frases como “Polvo eres y en polvo te convertirás” o “Conviértete y cree en el Evangelio”, recordando a los creyentes la importancia de la conversión y el arrepentimiento.
La Cuaresma es considerada un tiempo de oración, ayuno y caridad, invitando a los fieles a renovar su fe y comprometerse con prácticas de sacrificio y solidaridad.
Durante este periodo, la Iglesia promueve la reflexión sobre la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, llamando a la comunidad a vivir con mayor espiritualidad y compromiso cristiano.
En diferentes países, el Miércoles de Ceniza se vive con gran devoción, con misas especiales y actos litúrgicos en los que se enfatiza el significado de este tiempo de preparación.
Con esta celebración, la Iglesia da inicio a uno de los periodos más importantes del calendario litúrgico, que culminará con la conmemoración de la Semana Santa.