
Elijah Blue Allman, hijo de la cantante Cher y del fallecido músico Gregg Allman, fue trasladado de urgencia a un hospital en Joshua Tree, California, tras sufrir una sobredosis durante el fin de semana. De acuerdo con medios estadounidenses, el incidente ocurrió mientras Allman se encontraba en situación de calle.
Con 48 años, Elijah ha enfrentado múltiples recaídas por consumo de sustancias desde su adolescencia. En entrevistas pasadas, reconoció haber comenzado a consumir marihuana y éxtasis a los 11 años, y luego heroína y opioides.
El portal TMZ informó que el músico fue hallado inconsciente y que su estado fue calificado como crítico al momento de su ingreso hospitalario. Según fuentes cercanas citadas por el Daily Mail, su vida “se salvó por poco”.
El caso vuelve a poner sobre la mesa los esfuerzos fallidos de su madre por intervenir legalmente. En 2023, Cher solicitó la tutela temporal de las finanzas de su hijo, alegando que padecía problemas mentales y adicción. Sin embargo, la solicitud fue retirada en septiembre de 2024 luego de que Allman afirmara que estaba sobrio y asistiendo a reuniones de recuperación.
Elijah enfrenta además un proceso de divorcio con la cantante Marieangela King, quien ha solicitado manutención mensual y alegado diferencias irreconciliables. En meses recientes, el músico ha sido visto solo y desorientado en calles de Los Ángeles, según testigos.
La situación revive el historial familiar de adicciones. Su padre, Gregg Allman, falleció en 2017 tras complicaciones relacionadas con el abuso de sustancias, y su tío Duane Allman también tuvo antecedentes similares antes de morir en 1971.
El caso de Elijah Blue Allman ilustra cómo los problemas de salud mental y adicciones pueden persistir pese al apoyo familiar o la fama, y ha vuelto a generar preocupación por su estado de salud y su seguridad personal.