
El comerciante Po Xie, propietario de la tienda Mudan, deberá presentarse periódicamente ante la justicia y pagar una garantía económica de 100 mil pesos bajo compañía, como medida de coerción dictada por la jueza Fátima Veloz, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional.
La medida se impuso después de un altercado durante un operativo de la Dirección General de Migración (DGM), en el cual fueron detenidos 35 ciudadanos haitianos en situación migratoria irregular dentro del local, ubicado en la avenida Duarte.
El Ministerio Público había solicitado condiciones más severas, incluyendo un impedimento de salida del país y una fianza de 200,000 pesos, pero el tribunal consideró innecesaria la prisión preventiva, señalando que no había evidencia de riesgo de fuga ni fundamentos para una medida más estricta.
“El tribunal se destacó al no imponer la prisión preventiva solicitada, que representaba la medida de coerción más gravosa, ya que no existían elementos que indicaran peligro de fuga. En este caso, no había un arraigo suficiente que justificara tal medida para el tipo penal en cuestión”, expresó Freddy Manuel Díaz, abogado del imputado.
Díaz también cuestionó la intención de la DGM de imponer un precedente que calificó como “arbitrario y abusivo”, destacando que el fallo reafirma el respeto al debido proceso. “Nos sentimos satisfechos con la decisión. En lugar de prisión preventiva, se impuso la presentación periódica y una garantía económica”, afirmó.
Po Xie enfrenta cargos por supuestamente obstruir a agentes migratorios y agredir a un representante legal de Migración durante el operativo. Según la DGM, esta no es la primera vez que el comerciante incurre en la contratación de personas sin estatus legal, situación por la cual ya ha recibido una sanción económica de 450 mil pesos en el pasado.
El caso ha generado un debate sobre el control de la inmigración y las responsabilidades de los empleadores en relación con las leyes laborales y migratorias en la República Dominicana.