
La resolución judicial llega luego de que Mark Allen Geralds renunciara a continuar apelando su caso, en un momento en que Florida registra un aumento notable en el número de ejecuciones dentro de su sistema penitenciario.
Un hombre condenado por asesinar a puñaladas a una mujer durante un robo en su vivienda hace más de tres décadas será ejecutado este martes por la noche en Florida.
Mark Allen Geralds, de 58 años, está programado para recibir la inyección letal a partir de las 6 p. m. en la Prisión Estatal de Florida, ubicada cerca de Starke. Geralds fue hallado culpable de homicidio, robo a mano armada, allanamiento y hurto de vehículo, recibiendo una sentencia de muerte en 1990.

Aunque la Corte Suprema de Florida anuló inicialmente la pena, mantuvo la condena, y en 1992 se dictó nuevamente la sentencia de muerte.
De llevarse a cabo, se convertiría en la ejecución número 18 del año en el estado, ampliando un récord histórico de ejecuciones anuales en Florida durante 2025.
Según los expedientes judiciales, el hijo de 8 años de Tressa Pettibone fue quien encontró a su madre sin vida, golpeada y apuñalada en la cocina de su hogar en Panamá City en febrero de 1989. Geralds, carpintero de profesión, había realizado trabajos de remodelación en la casa anteriormente.
Una semana antes del crimen, Geralds coincidió con Pettibone y sus hijos en un centro comercial. Durante ese encuentro, la víctima comentó que su esposo estaba de viaje.
Más tarde, Geralds se acercó al hijo en una sala de videojuegos para preguntarle cuándo regresaría su padre y a qué hora salían y regresaban él y su hermana de la escuela, según detalla la documentación del caso.
La investigación reveló que Geralds había empeñado joyas con rastros de sangre de Pettibone y que las ataduras de plástico usadas para inmovilizarla coincidían con otras encontradas en el vehículo del acusado.
Tras la firma de la orden de ejecución el mes pasado y la posterior fijación de la fecha, Geralds comunicó al juez su decisión de no presentar más recursos. La corte confirmó su voluntad.

En lo que va del año, 44 reclusos han sido ejecutados en Estados Unidos, y aún quedan varias ejecuciones programadas para los próximos meses.
Desde el restablecimiento de la pena de muerte en 1976 por la Corte Suprema estadounidense, el mayor número de ejecuciones anuales en Florida había sido ocho en 2014. En 2025, el estado encabeza la lista nacional. De hecho, ya está planificada otra ejecución para la próxima semana, bajo las órdenes firmadas por el gobernador republicano Ron DeSantis.
Frank Athen Walls, también de 58 años, está citado para ser la 19ª ejecución del año en Florida el próximo 18 de diciembre. Fue declarado culpable de matar a tiros a un hombre y una mujer durante un robo y confesó posteriormente otros tres asesinatos.
Las ejecuciones en Florida se realizan mediante una combinación de un sedante, un agente paralizante y un fármaco que provoca paro cardíaco, según el Departamento de Correcciones estatal.
Fuente: Infoabe